-Tengo que cambiar la película.
-En un rato.
-Vamos, no seas testarudo.
-Solo un ratito más.
Felix lo abraza con fuerza, finge estar dormido, ambos saben que no es así. Él remolonea y luego se ríe.
-Eres de lo que no hay. ¿Quieres ir a cama?
-No.
-¿Vemos otra película?
-No sé.
Oliver acuna su cabeza mientras acaricia el pelo castaño. Observa sus labios finos, las largas pestañas oscuras, la frente amplia, lo angulosa y perfecta que es su cara.
-Se me hace raro.
-¿El qué? ¿Esto?
Felix niega.
-Esta paz, parece casi un sueño.
Su novio asiente y suspira. Quien le diría que las cosas cambiarían tanto en unos meses.
-Ojalá dure bastante, la verdad. Me podría acostumbrar.-Oliver roza la frente del chico que se levanta un poco y se besan.
-¿Se te hace raro?
-¿El qué?
-Esto.-Se señala a ambos.
-La verdad no, pasé tantos años negando a sentir lo que sentía, culpándome por todo, sintiéndome mal por querer a alguien de mi mismo sexo, que ahora que lo hago, me siento bien, pleno, feliz. Me alegro de que esa etapa de mi vida haya quedado atrás.
Felix entrelaza sus dedos con los de Oliver y ambos los miran en silencio.
-Yo también me alegro de que esa etapa haya quedado atrás.
Ambos se quedan abrazados en el sofá con el ruido de la televisión de fondo.
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Estación 117 (1- En llamas)
RomansHuyendo de su pasado, termina mudándose a un pequeño pueblo de Texas, pero lejos de lograr pasar página, el pasado vuelve para terminar con ella. Solo un milagro podría sacarla de las llamas del infierno en el que se ha metido.