Dolce!

9

Doyoung subió el volumen de la música y continuó cantando mientras Hyunjin se cubría las orejas con las manos, cerrando los ojos con fuerza—y me mantengo de mi lado de calle limpia—el omega se subió a su cama y señaló su lado del cuarto, burlándose del alfa—no tienes idea de lo que quiero decir, porque el karma es mi novio, el karma es un dio, el karma es la brisa en mi cabello en fin de semana—se divirtió riéndose del pequeño secreto de Hyunjin —el karma es un pensamiento relajante ¿no te da envidia que para ti no lo es?

—pensé que éramos amigos—Hyunjin dijo fingiendo estar herido. 

—nunca seria amigo de un alfa—aseguró Doyoung, poniendo ambas manos en su delgada cintura—todos los alfas del mundo son mis enemigos, nunca tendré un amigo alfa, nunca me casaré con un alfa. 

Hyunjin rio divertido—¿y entonces? ¿vas a casarte con otro omega? ¿te gusta que te metan los dedos?

El omega frunció el ceño y se bajo de la cama de un salto, asustando al alfa que rápidamente intentó huir, pero Doyoung fue más rápido y saltó encima suyo para pegarle con la almohada—¡maldito pervertido! ¡te odio!

—¡suéltame! ¡monstruo! ¡aléjate!—Hyunjin empezó a gritar, desesperado por alejarse del omega, se dio la media vuelta y ambos cayeron de la cama, rodando en el piso mientras se tiraban del cabello, Doyoung no tenía mucho de donde agarrar, Hyunjin tenía el cabello demasiado corto, así que tuvo que agarrarle el cabello desde la raíz, haciéndolo llorar con más fuerza. 

El alfa se cansó de él y le agarró de las muñecas con fuerzas, gruñéndole, por un segundo Doyoung se asustó, quedándose estupefacto por la reacción de Hyunjin, el alfa lo acorraló contra el piso, haciéndolo sentir extrañamente indefenso, del terror que le dio, cuando Hyunjin lo soltó, Doyoung le dio una cachetada, rasguñándole la cara. 

La puerta se abrió y aunque Hyunjin estaba furioso, se separó y miró enojado al viejo Geum, el encargado estaba con un bate en la mano, probablemente los había oído gritar—¿qué demonios creen que hacen?

—nada—respondió desafiante Hyunjin —Doyoung y yo estábamos haciendo bromas.—dijo, levantándose del piso, ambos sabían que lo que más le convenía era no tener problemas con el encargado de los dormitorios. 

—es la segunda vez que están haciendo bromas—el viejo Geum levanto el bate—la próxima vez que te vea arriba del omega te golpearé diez veces. 

Doyoung tragó saliva y Hyunjin mordió su labio inferior, claramente aterrado por la idea de ser golpeado—lo entiendo—respondió evitando mirar al encargado a los ojos. 

En cuanto el hombre cerró la puerta, Hyunjin empezó a llorar y Doyoung se sintió extremadamente culpable, acercándose a él para limpiarle las lagrimas, notando la marca de los rasguños en su mejilla—p-perdón—susurró un poco tímido y un poco asustado por la reacción que podría tener el alfa. 

Pero Hyunjin solo se quedó allí sentado mientras lloraba y se dejaba limpiar el rostro, Doyoung le secó las mejillas y le puso unas banditas de kuromi que tenía en su botiquín de emergencias, en realidad los rasguños no habían sido tan profundos, pero a Hyunjin parecía gustarle ser mimado y Doyoung se sintió culpable. 

Se fueron a la cama luego de que Hyunjin se calmó, el alfa se acostó sin cambiarse la ropa y se cubrió con todas las mantas mientras Doyoung se ponía el pijama y le miraba preocupado, en realidad Hyunjin no era tan malo, de verdad no lo era, pero Doyoung no podía tener preferencias si odiaba a los alfas en general, así que se sintió un poco confundido.

A la mañana siguiente, Doyoung se despertó antes de que la alarma sonara, se fue a duchar y cuando salió del baño, el alfa seguía durmiendo, el omega se puso el uniforme y peinó su cabello, sentándose en la orilla de la cama del alfa, mirándolo dormir.