Dolce!

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—no puedo creer que tuvimos este tipo de conversación aquí—rio con timidez Felix, todavía estaban sentados en las escaleras. 

Las manos de Hyunjin sudaban, él sonrió contento—el lugar no tiene importancia mientras podamos estar juntos. 

Felix negó con la cabeza y se levantó—iré a bañarme, podemos continuar hablando después de la cena, tenemos mucho que decir, pero no podemos simplemente hablar sin pensar. 

El alfa de cabellos naranjas asintió, imitándolo para subir las escaleras—gracias, Felix, estoy muy feliz de que compartamos lo que sentimos, incluso si recién es el comienzo. 

—me costó mucho aceptar lo que me pasa y lo que siento—admitió dirigiéndose hacia su habitación—y creo que me tomará aun más tiempo procesar todo esto. 

—está bien, tengo todo el tiempo del mundo—Hyunjin sonrió y se metió a su habitación.

Pero una vez dentro del cuarto, el alfa se dejó caer en el piso y se llevó una mano al corazón. 

—dios mío ¿estoy soñando? ¿voy a morir mañana?—se preguntó en shock, todavía no podía creer que el pequeño alfa le había dicho que también lo amaba, su corazón estaba latiendo tan apresurado que temía tener un infarto, se calmó a sí mismo con exhalaciones pausadas.—pero él quiere ir lento—se dijo a sí mismo mientras se levantaba y tomaba asiento en la cama—¿qué significa ir lento? me quiero casar mañana—murmuró desesperado. 

Hyunjin se mantuvo recostado viendo el techo, no dejaba de pensar en cómo debería comportarse en el internado ¿tal vez Felix no quería hacer nada público hasta sentirse confiado? ¿qué era lo que dijo acerca del desorden hormonal? ¿era porque ambos son alfas? 

Había oído que en las relaciones de alfas las parejas tienden a pelearse por el dominio porque los alfas estaban destinados a llevar el control, pero Hyunjin no tenía problemas con eso, ni por asomo intentaría dominar a Felix, no tenía la voluntad ni mucho menos las ganas, de hecho, prefería simplemente que lo controlen a controlar a alguien. 

Pero... ¿tal vez su propia presencia desafiaba a Felix?

Hyunjin se rompió la cabeza pensando en cómo debería comportarse a partir de ahora, por supuesto, quería presumir que él y Felix compartían sus sentimientos, pero no parecía adecuado por el momento. Además los dos eran alfas y podrían ser juzgados, que le daba completamente igual, pero no quería que el rubiecito pase por ello, y sin mencionar que estaban en la banda. 

Cierto, la banda. 

El alfa de cabellos anaranjados bufó con frustración y rodó en la cama hasta caer en el piso, allí se quedó tirado pensado en la banda, Dolce se volvería famosa, deberían tener cuidado con su relación.

¿Qué relación? 

¡No habían acordado ser novios!

—¿Hyunjin? ¿estás bien? ¿te dormiste? llevo cinco minutos tocando la puerta—susurró el pequeño alfita de pecas. 

Hyunjin se levantó del piso y sonrió a pesar de lo nervioso que estaba—estoy perfectamente bien, no podría estar mejor, es el mejor día de mi vida—aseguró. 

Felix soltó una risita tierna—bueno, la cena está lista. 

—oh, perfecto, voy—murmuró sacudiendo su ropa. 

La tía de Felix estaba leyendo algo en su tablet mientras comían, Hyunjin miró al rubiecito comer muy concentrado y luego miró a la alfa que apenas picaba su comida, él tampoco tenía hambre, pero había notado hace tiempo que a Felix le gustaba mucho comer, que de hecho, las personas que lo rodeaban se quedaban comiendo solo para acompañarlo.