Dolce!

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Johnny se mantuvo abrazando con fuerza al pequeño omega, normalmente no se daban tantas muestras de afecto en público por los fanáticos alrededor, pero no pudo evitarlo cuando una parte de sí se estaba yendo lejos por un tiempo. 

—te voy a extrañar como no tienes idea y mi orgullo está herido porque regresarás directamente a vivir con Hyunjin —murmuró contra sus cabellos rubios. 

Felix rio y se apoyó en su pecho mientras Hyunjin hacia un pucherito—ya soy un niño grande y Hyunjin necesitamos nuestro espacio, observa como se volverá loco en las siguientes semanas —susurró abrazándolo. 

Johnny miró al alfa de cabellos anaranjados y suspiró—sí, igual, más que loco, yo creo que se deprimirá. 

—por eso tienes que cuidarlo mientras no estoy. —Felix se despidió de Johnny y luego recibió un fuerte abrazo de Sungkyung, ella lo apretó tan fuerte que el pequeño omega se quejó.

Jiyeon estaba allí también y cada vez que la veía no podía evitar sentirse como un niño pequeño, la alfa lo abrazó con suavidad y le susurró que la mantuviera al tanto de su estadía en Australia. 

Por último, Hyunjin se estaba aguantando las lagrimas mientras lo abrazaba—cuídate mucho, por favor—él rogó. 

—estaré bien, Hyunjin, solo espérame.

Y así se fue. 

Tendría mucho para pensar cuando estuviera solo en el extranjero, el lugar que siempre había sido su hogar ya no volvería a serlo nunca más, su hogar estaba en donde Hyunjin estuviera y el alfa se quedaba en Corea mientras que él debía irse, aunque había sido quien dijo que Hyunjin lo pasaría peor, lo cierto es que temía que él seria quien sufriría más. 

En el avión ya estaba sintiéndose solo y su omega no hacía más que llorar mientras él intentaba ser fuerte. 

La banda no estuvo mejor con su ausencia, Sungkyung permaneció sentada en el sofá mientras Hyunjin lloraba en la habitación y Johnny tomaba su gorra y abrigo para ir a dar una vuelta en el intento de levantarse el animo. 

Habían estado juntos por la última década, en cualquier momento pasarían más tiempo juntos que lo que estuvieron sin conocerse, era normal sentirse abatido y desolado por la distancia. 

Se sintió fuera de lugar en sus penas, no tenía a dónde ir a llorar, en primer lugar ¿Por qué lloraría? ¿Por el omega de otro alfa? Eso era ridículo, pero Felix no solo era el omega de Hyunjin, era su mejor amigo, como un hermano pequeño, un cachorro.

Acabó conduciendo hacia el hospital en dónde Doyoung hacia su residencia, aunque no le avisó que iría, no iba a verlo, aquel lugar tenía un inmenso patio en dónde Johnny sintió que tal vez podría utilizar para pensar.

Y como de costumbre, en aquel inmenso lugar no había nadie más que un par de pacientes ancianos y un médico mirando videos en su celular.

Así que tomó asiento en una banca y dejó salir una exhalación.

Los siguientes días sin Felix serían difíciles.

Se quitó la gorra y miró el césped, tenía que acostumbrarse a estar por su propia cuenta, pero ahora que estaba volviéndose mayor comprendía que sería más difícil, estaban hechos para vivir en compañía. No podía desafiar la realidad.

—mira que tenemos aquí, le diré al portero que comience a revisar quiénes vienen a disfrutar del jardín para los pacientes y residentes—Doyoung dijo cuando lo vio.

Johnny sonrió de lado y le miró agotado—buscaba un lugar para dejar de pensar tanto, pero es bastante difícil.

El omega traía consigo una bolsa de patatas fritas, se sentó a su lado y le compartió—sin refresco porque la máquina se averió.