73. ¿POR QUE SOY TAN IDIOTA EL 99% DE LAS VECES?

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Felipe


Meto las dos enormes maletas de Candace en el coche y mi pequeña mochila mientras ella besuquea a Ferrero en la cabeza tras su última sesión de fotos.

—Volcán, ¿te llevo al piso de Izan o a casa de tus padres? —arranco el coche y pongo la calefacción para ella, aunque eso implique quedarme en mangas cortas en su interior.

—¿Mis padres? —frunce el ceño— ¿Para qué me ibas a llevar ahí?

—Mañana es Nochebuena —le recuerdo.

—Lo sé, pero nosotros no solemos celebrar eso —se ríe cuando Ferrero le pasa la lengua por la nariz— Mis padres hacen una gran fiesta e invitan a gente importante, pero Izan y yo hace años que no asistimos.

—¿Entonces lo celebráis los dos solos?

—No, no —me mira— Él estará con alguna chica en un hotel carísimo o fardando de avión privado —pone los ojos en blanco.

—¿Estarás sola? —pregunto confuso.

—¿En serio te sorprende más eso a que mi hermano tenga un avión? —una sonora carcajada sale de su garganta mientras yo no puedo entender como en una fecha tan especial puede estar sola y no importarle en absoluto.

—Es lo único que me importa —respondo serio— No pienso dejarte sola.

—No estaré sola, esta bolita estará conmigo toda la noche —le sonríe con cariño— Aprovecharé que mi hermano estará fuera para dormir con Garfield.

—Supongo que este día lo pasabas con él —respondo intentando calmar mis nervios— Pero no quiero saberlo —le interrumpo antes de que diga lo que ya sé y las tripas se me revuelvan al imaginarlos juntos— O quizás no y siempre has estado sola. Pero no esta vez.

—Estaré bien.

—Lo sé, mis padres se van a volver locos cuando te vean —resoplo al imaginarlos... espero que no me dejen en ridículo como les gusta hacer siempre que hay invitados.

—¿Tus padres? —un gallo de lo más gracioso sale de su garganta cuando formula la pregunta.

—Te vienes conmigo —la miro decidido.

—¿Estás loco? ¿Cómo voy a ir a tu casa? ¿En Navidad? ¿Qué van a pensar? Ya tendrán todo preparado, no han contado conmigo, no puedo presentarme ahí como si nada. ¿Saben acaso quién soy? Por Dios, me va a dar algo... —se sujeta el pecho mientras este se mueve de arriba a abajo.

Le envío un mensaje a mi padre y este me responde enseguida.

Papu: Ya estoy sacando un plato de más. No corras y ten cuidado.

Tenemos muchas ganas de conocerla, pero podemos esperar, aunque no te prometo quedarme sin dedos por morderme las uñas.

Qué nervios.

Amor con fecha límite #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora