“La vida es fugaz, llena de peligros y retos, de desilusiones y sueños por descubrir. Pero, da igual quien seas, siempre acaba del mismo modo”
Dolor – Jack Lorenz
–Feanor Lake–
– ¡Para de luchar! – Gritó Haiti a la vez que me lanzó una patada voladora directa a mi pecho.
Esquivé el ataque, la agarré de la pierna, intenté lanzarla, pero con una llave, me rodeó el cuello con los brazos y me tiró de espaldas al suelo.
La lluvia habia llegado, la humedad calaba los huesos y el frío aumentaba el dolor de los golpes.
Varias explosiones se escucharon a la lejania, la lucha en el círculo central se había intensificado, los Lobos seguían dando resistencia.
Los Cuervos volaban por toda la ciudad, atacando a la población que decidía sublevarse, todas las calles estaban en llamas, con barricadas improvisadas, mirases donde mirases, sólo había caos.
Dolorido y con varios cortes leves por el cuchillo de Haiti, logré reincorporarme de nuevo.
– Déjalo, Feanor... No puedes ganar. Por favor...no quiero seguir enfrentándome a tí... – Noté un leve temblor en su voz – ¡No quiero hacer esto! No lo hagas más difícil...
– Aún no he perdido nada... – Un temblor hizo retumbar el muro central, que poco a poco empezó a resquebrajarse y a caer.
Marshall y Clint lo habían conseguido.
– Los muros que protegían a Odín han caído, como te dije...el destino se puede cambiar.
– No has cambiado nada, un simple muro de piedra no es nada. Las barreras mágicas son impenetrables, estan atrapados.
– ¿Segura? Si no me equivoco, tengo que coger un barco... es la hora...
Una potente luz iluminó la ciudad, tres barcos voladores se habían adentrado a la ciudad, iluminándola con potentes focos que hicieron parecer que era de día.
En los barcos había grabado el símbolo de una estrella. Las naves sacaron sus cañones y comenzaron a disparar contra los edificios que formaban las barreras, destruyendolas y liberando los distritos cuando su luz dorada se desvaneció.
– ¿Qué...? – Haiti se sorprendió, para luego mostrar una mueca de rabia incontrolable. – Pei... ¡Maldita humana entrometida!
– Verás... el permiso Beta es el permiso de Star. En resumidas cuentas, Star hizo heredera a Jessica Pei, lo que significa que toda su compañía, así como su ejército... son suyos... Asi que nos han prestado, unos cuantos barcos... Cómo venganza por la muerte de Star. Odín ha cabreado a la gente equivocada, tal y como hizo Ellen... ¿Te crees que me la iba a jugar todo a unos civiles sin experiencia en el combate?
– Feanor... Tú y tus ases bajo la manga... – Haiti luchaba por no explotar en furia. – ¡Para de oponerte! Con el poder de los dioses podemos empezar de nuevo, cambiar la mentalidad de las personas para que no haya maldad. ¡Crear un mundo perfecto! Esos idiotas desaprovecharán el poder de los dioses... Odín quiere poder, Michelle solo quiere salvar a una persona. ¡Nosotros podemos ayudar a millones! ¿Por qué no lo ves?
– Lo veo...y manipular la mente de las personas, quitarles el libre albedrío, incluso si es para eliminar el mal, me parece horripilante. Es acabar con la individualidad, lo que nos vuelve racionales... Humanos, como dirían en Brinchexter. Acabemos con esto, Haiti.
Me lancé sobre ella, saqué mi revolver, ella se apartó, lo habi escuchado, pero disparé cerca de su oído.
La explosión la aturdió, sus orejas se volvieron locas, tratando de localizarme. Le propiné un puñetazo en la mandíbula con tal fuerza que noté que mi puño quebraba con los huesos de su mentón, su labio inferior reventó.
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Fairy Luck : La marca del Fénix || Libro 1||
Fantasy"¡Sean todos bienvenidos a Fairy Luck! Tu tienda de antigüedades y artículos mágicos de confianza." ★ Situada en el corazón de Brinchexter, ciudad inglesa en plena Revolución Industrial de un mundo donde existe la magia, se encuentra la tienda de Fa...