𝐶𝐴𝑃𝐼𝑇𝑈𝐿𝑂 𝑇𝑅𝐸𝐼𝑁𝑇𝐴 𝑌 𝑆𝐼𝐸𝑇𝐸 "𝒇𝒆𝒔𝒕𝒆𝒋𝒂𝒓".

356 49 108
                                    

Bueno, yo me voy. Ahora que Kevin sabe que Diego es un niño inmaduro que no mata ni una mosca, me retiro- Lozano tomó el abrigo de peso ligero que su alfa le presto porque "el pronóstico decía que estaría frío" y se lo colocó.

Lainez arrugó su nariz viendo feo a Hirving.

Hmm... ¿en serio ya se van?, por qué mejor no vamos a beber algo para festejar que llegué - dijo Kevin, el omega de alta estatura, que solo era un año mayor a Diego.

¿A tomar?- cuestionó Lio.- Guillermo y yo estamos dentro.

Mi alfa tiene razón sobre eso- dijo Ochoa acercándose a Lio para tomar su mano sonriendo.

¡Yo también voy!, a donde Kev... a dónde mis empleados digan- corrigió Diego evitando la mirada de Kevin sobre él.

Hmm..., bueno, voy a- Lozano iba a salir por Edson cuando este entró.

Buenas noches - dijo amablemente a todos saludando con su mano- ¿qué tal les fue hoy en su trabajo?.

Entonces todos empezaron a hablar al mismo tiempo, Edson trató de atenderlos a todos, pero la voz que más sobresalía era la de Diego diciendo "Y ENTONCES KEVIN ME DIJO QUÉ" y Lozano veía desde atrás.

Bueno, me lo van a marear, atrás- Hirving se hizo espacio entre todos hasta llegar a su alfa y lo abrazó por la espalda sonriendo al ver su rostro.

Bueno, voy por las llaves del café y regreso para irnos, hay un bar aquí cerca- dijo Lainez caminando a la oficina... pero Kevin lo siguió en silencio.

Yo conozco uno - dijo Lio. Pero Guillermo negó diciéndole "no creo que quieran ver strippers bailar, amor" en un susurro y Messi solo asintió diciendo un "oh".

Mi amor, estuve muy triste sin ti- expresó primero Hirving quién era apapachado con amor y ternura por su alfa. Respirar su olor lo hizo sentirse feliz.

Yo también mi cielo, mi Hirving, mi vida- Edson tomó las mejillas de su omega en su manos y dejó besos en su frente, nariz y labios con amor.

Mi Edson, Kevin, nuestro nuevo compañero de trabajo dijo que si podíamos ir a beber algo ahorita - comentó Lozano entre cada beso de su alfa que le hacía cosquillas... pero rió solo al sentir como su alfa lo llenaba de baba sin querer entre cada beso.

Está bien, mi amor, ve, y pídete una buena botella con la tarjeta - respondió Edson acariciando la mejilla de su omega.

¿Que vaya?, no, yo solo no voy a ningún lado... vamos los dos, ¿sí?- Hirving sonrió con ternura y le hizo "ojitos" a su alfa parpadeando repetidas veces.

Espera, creo que se me bajó la presión. Te ves bellísimo así, dejame tomarte una foto- Álvarez metió su mano a su bolsillo pero Hirving lo detuvo entre risas.

¿Vamos?.

A dónde mi lindo omega de ojos brillantes decida. Allá voy yo.- Contestó Edson sonriente.

No mames, creo que se me perdieron las llaves- susurró Diego tocando su pecho, sus bolsillos y los bolsillos traseros de su pantalón. No sentía las llaves por ningún lado de estos.

La puerta de su oficina recién cerrada detrás de él lo hizo girar.

Ahí vió a Kevin. Quién había cerrado la puerta.

¿Puedo hablar contigo?- cuestionó el omega de 1.75.

Lainez tragó saliva en silencio, mirando fijamente a Kevin. Pero supo que estaba rojo porque sintió sus mejillas arder con intensidad.

Quiero agradecerte por darme este trabajo. - Confesó el omega.- La verdad es que estuve tratando de aspirar a puestos importantes que normalmente le dan a los alfas... pero como soy recién egresado y omega, no me daban un lugar.- Continuó con melancolía.

La vida es muy injusta. Quizás ser trabajador en un café no sea la gran cosa, pero es un comienzo -Diego sonrió.

Kevin también lo hizo y desvío su mirada algo tímido.

Bueno, tengo que salir a decirles una noticia triste... creo que perdí las llaves...vaya jefe- Lainez suspiró y caminó pasando al lado de Kevin.

Este lo detuvo del brazo antes de que pudiera tocar la perilla de la puerta.

Espera, es que... aún no termino...- el omega de 1.75 giró su cuerpo para quedar frente a frente con Diego.

Lainez miró más de cerca el rostro de Kevin, el que tanto le gustaba. Inhaló el olor a este, era fresco, era a vainilla, muy dulce... se enamoró de ese increíble olor, y de quién lo portaba.

Quiero darte las gracias pero ya no solo verbalmente...- Kevin posó su mano en la mejilla rojiza y caliente de Lainez.

Espérate porque me estremecí- susurró Diego muy nervioso sin apartar los ojos de Kevin, quién se iba inclinando poco a poco a los labios del alfa más bajo.

Antes de que pudieran besarse.

¡Diego!, yo sé que ya no te aguantas la ganas, pero ¿podés apurarte?, ya después follan lo que quieran - Lio golpeó la puerta haciéndolos retroceder.

Kevin desvío su mirada y no dijo nada.

Lainez respiró con molestia y abrió - ¡te voy a bajar el pinche sueldo!- encaró a Lio con molestia y salió de la oficina dejando a Kevin con una risita en sus labios y a Lio indignado con la boca abierta.

¡Y ya encontré las llaves!- volvió a gritar Diego que, las había dejado en la barra.


Entonces todos se fueron a un bar. Caminando, dejando el auto de Edson en el café ya que, los 6 no cabían en este.

Les dije que me subía a Guillermo en las piernas, ya me cansé - Lio se quejó caminando de la mano con pesar, junto a su sigma.

A penas llevamos una cuadra - respondió Diego quién iba en medio con Kevin.

Ahh, ¿por qué acepté?- Messi hizo un berrinche quejándose.

Amor, Lio, ¿quieres que te cargue?- cuestionó Ochoa con alegría. Lio asintió, entonces se subió de un brinco en la espalda de su fuerte sigma que lo llevaba con facilidad.- No pesas nada.

Y tú eres tan fuerte, mi Guille- Lio aprovechó su posición para acariciar el cabello rizado de su sigma.

¿En serio convives así todos los días?- Edson se inclinó hasta su omega para susurrar aquello.

Mi amor, son buenas personas, solo...- pero se tragó sus palabras Hirving, al ver que...

Córrele- Diego cruzó la calle (solitaria y obscura) para llegar a un parque del costado.

Espera, amor, Guille, ahorita vengo- Lio besó con rapidez la mejilla de Ochoa para cruzar con total imprudencia detrás de Diego al parque.

No mames, ¡vengan acá par de chiquillos desobedientes!- gritó Hirving.

Kevin se acercó a Ochoa- ¿así son siempre?.

¿Verdad?- respondió más rápido Edson que habría cuestionado aquello primero.

Diego y Lio estaban jugando en un sube y baja gritando como locos.



Después de lograr bajarlos después de que les prometieron una caguama, llegaron al fin a un club dónde podrían beber y bailar. Eran las 9 pm, y el ambiente aún estaba muy tranquilo y sano.

Bueno, yo voy a invitar la primera ronda, ¿qué quieren tomar?- una vez en una mesa donde cupieran los 6 perfectamente, Edson se levantó sonriente a decir aquello. Hirving admiró la manera en la que trataba de congeniar con su círculo.

Y todos empezaron a decir sus idas, incluso se escuchó un "tonayan" de parte de Diego, como broma.

Entonces Edson se retiró a pedir una costosa botella para beber.

¡Vamos a bailar Guille!- Lio no necesitaba alcohol para estar en ambiente. Tomó de la mano a su sigma y pasó por en frente de Kevin y Diego, quienes estaban... nervioso el uno por el otro.

Hirving lo entendió.

Yo voy a...- miró a donde estaba Edson- con mi Edson, permiso- dijo sonriente y se levantó de su lugar.

Dejando solos, completamente solos a los pequeños jóvenes... que se gustaban.

¿𝐃𝐄 𝐍𝐔𝐄𝐕𝐎 𝐓𝐔? [𝘏𝘪𝘳𝘷𝘪𝘯𝘨 𝘺 𝘌𝘥𝘴𝘰𝘯]. OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora