Otra vez lunes- se quejó Lio viendo como Diego con mucha felicidad giraba el cartel de "abierto". Ya todos habían llegado.
Lainez estaba sumamente feliz, después de haber pasado su domingo con Kevin, y regresar a verlo todos los días, pronto comenzó a sentir una calidez en su pecho cuando lo veía, cuando este sonreía o lo besaba, pero...
¿Qué eran?.
Aquello hizo detenerse al alfa de baja estatura, y pensar un poco en esa respuesta.
Ochoa estaba con más ánimo. La idea de que pronto les darían la noticia de que, ahora dos omegas esperaban a sus cachorros, lo emocionaba. Pero no solo él se veía con más ánimo, sino también lo tenía Lio, quién no dejaba de recordarle a su sigma cuánto lo amaba.
El único que se veía con menos energía era Lozano, quién se le veía agotado y con más ojeras de lo normal, aunque emocionalmente se sentía como un sube y baja de emociones. Pensó que era por estar lejos de su alfa.
Kevin por su parte, era la nueva alegría joven del café, alentaba a todos a trabajar y constantemente aprendía cosas nuevas, y daba algún que otro consejo funcional.
Entonces Diego se acercó a Hirving cuando este llevaba un pedido- ¿ahorita puedo hablar contigo?- cuestionó Lainez.
Hirving rió- eres el jefe, ¿en serio debes pedírmelo?- y continúo caminando para dejar el pedido en la mesa 4 pero...
una punzada en su estómago en la parte baja lo hizo detenerse y agacharse un poco. Fue muy raro, no fue como dolor, fue más como algún tipo de indicador.
No quiso prestar mucha atención y simplemente siguió caminando.
Dime- una vez disponible, Hirving llegó al lado de Diego quién, admiraba la amabilidad con la que Kevin atendía.
Es hermoso- susurró Lainez con una sonrisa- Hirving, estuve pensandolo y... no sé qué soy con Kevin -confesó el alfa.
Hmm...¿y por qué no le preguntas?- dijo Lozano con obviedad.
Diego hizo un "pfff" y negó.- Me da pena...- dijo en un susurro tímido. Lozano sonrió.
Eres demasiado inocente para eso. Lo sé.- suspiró - pero tienes que hacerlo algún día, ¿tú qué quieres ser con él?.
Hmmm... quiero salir con él, tomar su mano, besarlo, respirar su olor...- comentaba Lainez.
Marcarlo- interrumpió Lozano. Diego le miró inmediato pero sólo hizo un gesto de "sí".
Entonces ve y dile que si quiere ser tu omega, tu novio, tu pareja, tu hombre- Hirving expresó antes de salir y tomar otro pedido a unas personas que recién habían llegado.
Dejando a Diego admirando pero ahora con una mueca de preocupación, a Kevin.
¿Estás seguro que no nos ven aquí?- susurró Lio entre jadeos por los besos tan húmedos y repentinos que Guillermo le estaba dando, dentro de la oficina de su jefe.
Diego está ocupado- susurró Ochoa acariciando el cuerpo de Lio con insistencia.
Cuando la temperatura en ambos empezaba a subir.
¡Pinches calenturientos!, ¡les voy a echar agua!- Diego entró a su oficina y vió la escena erótica de sus empleados (amigos) sobre su escritorio.
Lio estaba encima de Guillermo y este recostado abajo, y ninguno de los dos tenía ya su playera. Inmediatamente Ochoa indicó a su alfa que de bajara.
Perdón, Diego-dijo con vergüenza Ochoa buscando su camisa en el suelo.
No dejás meterla agusto- se quejó Lio con Diego, y tomó con un "gracias amor" su playera que le entregó Guillermo. Entonces salieron de la oficina.
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¿𝐃𝐄 𝐍𝐔𝐄𝐕𝐎 𝐓𝐔? [𝘏𝘪𝘳𝘷𝘪𝘯𝘨 𝘺 𝘌𝘥𝘴𝘰𝘯]. OMEGAVERSE
De TodoHirving Lozano es un joven de 23 años. Vive y trabaja cotidianamente además de que comparte un techo junto a su padre, un ex militar retirado. Pero este lo odia por ser un omega. Edson Álvarez por su parte, a su edad de 24 años se halla comprometido...