| A strange universe || Bughead || +18 |

C I N C U E N T A I N U E V E

- ¿Cuantos meses tienes tu, nena? -le preguntó Jughead a la rubia.

- 6 meses. -sonrió. - Y ya sabemos el sexo.

El sonrió, mirándola con un puchero y ella negó rapidamente.

- Dimeee. -pidió.

- No Juggie, también debe ser sorpresa para tu Betty y para ti. -sonrió, acariciando su mejilla. - Solo tienes que tener paciencia.

- Nunca había tenido tanta paciencia en toda mi vida como con este embarazo, y eso que solo tiene 2 meses. -suspiró.

Ella rió y besó sus labios. - Eres un esposo increíble, y estoy segura de que ella te va a entender asi como yo lo hice con mi Jughead. Menos mal que pudimos arreglar las cosas, porque yo tampoco me estaba sintiendo bien.

- ¿Como te sentías, amor? -le preguntó, acariciando su cabello.

- No lo sé, no tenía ganas de verlo y mi humor era siempre el peor y por alguna razón, solo lo pagaba con el... Y era muy extraño, porque cuando hacía eso, me sentía mal al hablarle así, pero igualmente lo seguía haciendo. Era muy confuso, ni yo misma me entendía.

- Bueno, supongo que debo hablar con mi Betty. Si ustedes tardaron más tiempo en resolverlo, ¿Crees que nosotros podamos resolverlo ahora?

- No se Jug, pero no pierdes nada intentándolo. -se encogió de hombros y el sonrió.

- Bueno, lo haré al volver. Pero ahora... ¿Me dejas seguir disfrutando de esto? -el sonrió, tomando sus pechos entre sus manos y besando su cuello.

- Las veces que quieras. -ella sonrió, y unieron sus labios.

Un buen rato despues, ya era medianoche en el universo donde estaba Jughead, cuando la rubia lo devolvió al suyo.

Despertó en medio de la desolada carretera y en cuanto pudo, dió la vuelta para volver a su casa.

Ya era muy tarde para intentar hablar con Betty, además de que probablemente ella ya estaría durmiendo, asi que se decidió por hablar con ella al día siguiente.

•

Por la mañana, llevó a las niñas a la escuela y a Zoe la dejó con Fangs en su trailer, para poder estar a solas con Betty y hablar con ella.

Entró a la casa y la vió en la cocina, preparandose su desayuno.

- Betts. -la llamó pero ella lo ignoró. - Nena, ¿Podemos hablar, por favor?

Ella continuó ignorándolo y el rodeó sus ojos. Subió a la habitación para ducharse rapidamente, pues se había despertado un poco tarde para llevar a las niñas a la escuela y no le dió tiempo de hacerlo.

Al salir de la ducha con una toalla alrededor de su cintura, la rubia lo miró desde la cama y frunció el ceño.

- ¿Que tienes en el cuello? -preguntó.

- ¿Ya no me quieres ignorar? -el frunció el ceño, algo molesto mientras se ponía un boxer, luego de quitarse la toalla.

- No evites la pregunta, Jughead. ¿Quien te hizo eso?

- ¿Quien crees? -preguntó, algo obvio, mientras terminaba de vestirse.

- ¿Me engañaste? -sus ojos estaban cristalizados.

- ¡No! -exclamó al segundo y bufó. - No puedo creer que siquiera hayas considerado eso. No, Betty, no te engañé. Fui al otro universo. -dijo, algo ofendido por su pregunta.

Betty levantó la mirada y sus lagrimas salieron de sus ojos.

- No llores, mi amor... -el le pidió, y se acercó a abrazarla.

Y por primera vez en semanas... Ella lo permitió. Permitió que la abrazara, que la escondiera contra su pecho y el sonrió levemente.

- ¿Por qué fuiste al otro universo? -preguntó entre sollozos, aún abrazada a él.

- Solo... Necesitaba sentirme bien, necesitaba sentir que me amabas...

- Pero yo te amo, Juggie. No debes ir a otro universo para sentirlo. -ella negó.

- Es que me ignorabas, no me dejabas hablarte ni nada, me sentía muy frustrado. -explicó.

- Lo siento. -ella se disculpó, limpiando sus lagrimas, sin sentido, porque luego salieron más. - Lo siento, Juggie. No podía controlarlo, no quería siquiera que me vieras, pero igual me sentía mal tratandote así... ¡Esto es horrible! -exclamó, molesta con ella misma. - Ni yo misma me entiendo...

El suspiró, sentándo en la orilla de la cama y la guió a su regazo.

- Yo estoy para apoyarte, ¿Me entiendes? -ella asintió. - Pero si me alejas no puedo hacerlo, mi vida. -le susurró, mientras acariciaba su mejilla con ternura.

- Lo siento Juggie. -respiró profundo, intentando calmarse. - ¿Me disculpas?

- Por supuesto que si, nena. -el asintió, besando su frente. - La verdad, yo tampoco entiendo por lo que pasas, ni lo que sientes. -admitió. - Pero se que es difícil, y prometo tenerte toda la paciencia que pueda, siempre.

- Gracias Jug. -murmuró. - Y lo siento por pensar que me engañaste, solo fue algo que pensé en el momento. Nunca me diste razones para dudar de ti y no lo hago, se que nunca me harías eso.

- Está bien, mi amor, ya deja de disculparte. -le pidió, y ella asintió, besando sus labios lentamente.

- ¿Y como fue?

- ¿El que? -preguntó confundido.

- El sexo con la otra Betty.

- Oh... -murmuró, lo había tomado desprevenido. - Fue... Bueno. Contigo siempre es bueno.

- Pero no era yo. -lo miró mal y el suspiró.

- Basta. No quiero discutir.

- Bueno... -ella rodeó sus ojos, dejando su cabeza sobre el hombro de su esposo.

- ¿Vamos a comer?

- Si, Juggie. Tenemos hambre. -dijo, acariciando su barriga la cuál aún seguía un tanto plana y el rió, levantándose junto a ella.

•

¡Hola! ¿Que tal?

Vi que varias personas hoy me pidieron que actualizara pero durante el día no tuve ideas para escribir en esta novela, ni tampoco ganas, siendo sincera.

Pero por alguna razón, estaba por dormir y de la nada las ganas aparecieron, y las ideas también. 😂

Espero que les guste, bye! ✨