| A strange universe || Bughead || +18 |

P R Ó L O G O

Todos los chicos charlaban frente al bar de las serpientes mientras bebían cerveza.

Jughead se encontrada sentado en una silla, con la rubia en su regazo.

En su mano derecha tenía una botella de cerveza, mientras que la mano izquierda, la cual estaba llena de anillos, la tenía en el muslo desnudo de la rubia.

La rubia tenía un short de mezclilla junto a un top blanco, su chaqueta de la reina serpiente completando su look.

Mientras que Jughead tenía un pantalón de color negro, una camiseta gris y su chaqueta de las serpientes.

El pelinegro acariciaba el muslo de la rubia lentamente, cuando ella se removió con fastidio.

- Juggie. -se quejó.

- Linda, llegamos hace como una hora. -el le murmuró al oído, para luego darle un sorbo a su botella.

- Me quiero ir. -hizo un puchero. - Estoy aburrida.

- Debemos quedarnos para la carrera.

- ¿Por qué? -se quejó, alargando la e.

- Porque vamos a participar, ¿Lo recuerdas? -le murmuró divertido y ella sonrió de lado. - Además, los reyes deben estar presentes.

Ella soltó una pequeña risita y Jughead besó su mejilla.

- Y... Aún faltan un par de horas para nuestra reservación.

- ¿Reservación? -preguntó confundida.

- Si... Una habitación en el five seasons durante toda la noche solo para nosotros. -le murmuró al oído.

- Juggie, basta. Me pones nerviosa.

- Eso es lo divertido. -sonrió, dejando un rápido pico en sus labios.

- Siento interrumpirlos, tortolitos. -dijo Sweet Pea y la rubia se sonrojó, haciendo reír a ambos pelinegros. - Pero ya vamos a comenzar la carrera.

Jughead dió dos pequeños toques en la pierna de la rubia y esta se levantó ante el gesto, seguida del pelinegro quién la tomó de la cintura.

- Bien, entonces Betts y yo, ¿Contra..? -dejó las palabras al aire.

- Fangs y yo. -terminó Sweet Pea. - Yo voy a conducir esta vez. -sonrió.

- Bien, prepárate para perder.

- Aja. -asintió incrédulo y Betty soltó una risa.

- El nunca pierde. -le murmuró para seguir al pelinegro hasta el auto rojo.

Ambos subieron al auto, Jughead dejó un apretón en el muslo de la rubia y luego ambas manos sobre el volante, haciéndola sonreír.

Al voltear a su lado derecho, vieron un auto amarillo ahí, en el cual iban Fangs y Sweet Pea.

Este le sonrió retador y sonó el motor, haciendo reír a la rubia.

Cheryl caminó en medio de los dos y luego de unos segundos, agitó una cinta roja dando inicio a la carrera y ambos autos arrancaron al mismo tiempo.

La rubia iba sonriente en el camino cuando en una curva, el auto se descontroló y cayó por un barranco.

•

La rubia despertó agitada ante aquel sueño, o bueno, había sido más como una pesadilla. ¿Solo lo había soñado? Se sintió tan real...

Frotó su ojo derecho y vió la luz de sol a través de la ventana. Tomó su teléfono de la pequeña mesa junto a la cama.