| A strange universe || Bughead || +18 |

V E I N T I T R E S

La rubia se encontraba en una habitación del five seasons, viendo su imagen frente al espejo un tanto nerviosa.

Ya el día había llegado y tenía tantos sentimientos al mismo tiempo.

Estaba feliz, ansiosa, contenta, nerviosa y muchas cosas más.

Su mejor amiga y su prima, la cual había viajado desde California solo para estar presente en su boda, serian sus damas de honor.

No era como que tenía muchas opciones, además de ellas. Pero no sé quejaba, realmente agradecía que ellas la acompañaran ese día tan especial.

Ambas chicas tenían un vestido rojo corto, sobre las rodillas.

Cheryl terminaba con el peinado de la rubia, y se separó notando su nerviosismo.

- Prima, debes estar tranquila. -le pidió.

- ¿Y si me deja plantada en el altar? ¿O se arrepiente? ¿Y si dice que no? ¿Y si-

Toni la interrumpió.

- Betty. -soltó una risa. - Basta, de verdad. Tienes a Jughead estúpido detrás de ti desde hace años, decir que no o dejarte plantada es algo que el no haría, créeme.

- ¿Eso crees?

- Lo creo. -asintió Toni.

- Ella tiene razón. -dijo Cheryl. - Aunque ese vagabundo no me cae muy bien... -dijo haciendo reír a la rubia. - Se nota a kilómetros que te ama.

- Lo sé.

- Entonces deja de pensar tantas cosas estúpidas. -le pidió. - Y además, estás hermosa, ¿Cómo alguien podría decir que no a semejante mujer?

Betty se sonrojó levemente y las dos chicas rieron ante eso.

- Vamos. -la guiaron fuera de la habitación. Las tres salieron del hotel, y subieron al auto rojo de Cheryl, el cual conducía su chófer.

- André, al río Sweetwater.

Mientras tanto, los tres chicos se encontraban en la cabaña listos.

- Estoy nervioso. -murmuró el pelinegro, moviendose alrededor de toda la sala de la linda cabaña.

- Ya lo noté. -dijo Fangs cansado y rodeó sus ojos.

Sweet Pea soltó una risa y negó.

- Relájate amigo.

- No puedo. No va a llegar. Se va a arrepentir.

- De hecho, ya vienen en camino. -dijo Fangs y el soltó todo el aire.

- Ay por dios, siento que me desmayaré. -se abanicó con las manos.

- Ya basta, ¿Sabes que? Ve a esperar en el altar porque ya las chicas entrarán por la parte trasera de la cabaña. -señaló la puerta delantera, frente a la cual estaban todas las sillas y el altar.

El suspiró, y camino nervioso hasta este, para esperar al igual que todos los invitados.

Las tres chicas entraron a la cabaña por la puerta trasera, tal y como Fangs había dicho.

- Estás preciosa, Betty. -Fangs la tomó del brazo derecho y ella sonrió.

Sweet Pea la tomó del brazo izquierdo de la misma manera y asintió.

- Es cierto.

- Gracias, chicos. -murmuró con una sonrisa.

- Dios, te vas a casar. Crecen tan rápido... -murmuró Sweet Pea haciéndolos reír.