Lourdes Kanroji, única sobreviviente de un crimen terrible cometido poco antes del decreto de visiones aquí en Inazuma. También una persona que estuvo un tiempo siendo buscada por la ley al haber escapado de Inazuma después del decreto.
Aunque el caso fue abandonado cuando ocurrió el decreto, se por Heizou que el archivo sigue ahí. Pero Lourdes no coopera nada, no habla, no quiere reunirse con los investigadores... Y suele atentar contra su vida constantemente.
Su amiga Azumi suele ir al santuario Watatsumi para pedir consejos sobre cómo ayudarla, normalmente se pide que la persona en cuestión vaya personalmente pero Lourdes tampoco cede ante su amiga.
Yo realmente no tengo nada que ver en el caso, nunca fui cercano a la familia Kanroji ni nada pero las veía de lejos a veces en la ciudad cuando era más joven.
Quizá eso es lo que me provocó a tratar de estar pendiente de ella, ojalá lo hubiera estado cuando pasó lo de su madre.
La noche de ayer no tenía nada que hacer así que salí a caminar por la playa buscando hongos marinos. Me gusta recogerlos porque son brillantes.
Entonces oí el ruido de alguien lanzándose al agua y los posteriores braceos de un nadador ¿Pero quien a esas horas de la noche entraría al mar picado para nadar? Sin pensarlo corrí a la orilla de donde provenía el ruido y pude ver a una persona acercándose a una ola enorme, me lance al agua enseguida aunque tambien fui golpeado por la ola, cuando ésta pasó y asomé la cabeza del agua ya no veía al nadador por ninguna parte, me sumergí para ver en el agua pero estaba tan agitada que no se veía nada más que oscuridad... Además era de noche.
No sabía si salir del agua o continuar buscando, me estaba arriesgando demasiado pero debía salvar a esa persona. Gire mi cabeza buscando y finalmente vi una silueta tumbada sobre una orilla lejana. Nade como pude hasta ella y cuando la sostuve note que se trataba de una mujer.
Tenía el rostro golpeado por las rocas de la orilla y había espuma en sus labios.
-¿Lourdes?-
-Entonces me diste RCP y me trajiste de vuelta a mi casa-dice ella aun recostada, Azumi fue sacada del cuarto por su prometido hace un rato-¿Cómo sabes donde vivía? ¿Nos hemos visto antes?-
-Bueno yo...-
-Olvidalo-finalmente se sienta un poco pero al tratar de ayudarla soy rechazado-Es obvio que el caso Kanroji fue algo soñado hace tiempo, quien no conocería esta casa embrujada ¿No? Además creo haberte visto un par de veces en la ciudad con aquel investigador molesto-
-¿Hablas de Heizou?-
-Creo que si- no dice nada más por unos minutos hasta que comienza a toser.
-Toma un poco de agua-como no logra tomar el vaso yo se lo acercó a los labios-Fue una suerte que te encontrara-
-No lo fue, debiste fingir que no viste nada e irte-
-No podía-
Me mira cansina, hay algunos moretones en su rostro y cuello, debe dolerle todo pero aun así no lo expresa.
-En serio no podía, se que es un pésimo momento pero desde hace años que solía mirarte, cuando solo era un soldado raso te miraba paseando con tu madre por la ciudad y decía ¨Tengo que hablarle¨ solo que nunca lo hice, después pasó aquello y menos pude acercarme-
-Para ese momento ya eras un general-me sonríe levemente cuando lo dice-Solo veía como cambia tu uniforme con el paso del tiempo-
No decidimos más y entonces ella empieza a llorar. No pienso correctamente cuando la abrazo pero esta vez no me aleja y en cambio me abraza también.
Entonces ¿Ella también me miraba? Quiero preguntar pero sé que no es el momento.
-Extraño a mamá-sollozó-Extraño vivir normalmente, lo extraño tanto-la abrazó más fuerte tratando de cubrirla para que no pueda sentir más ese dolor-Incluso si no te hablaba también extraño poder verte en la ciudad, cuando volví no quería verte, sentía tanta pena de mi cuerpo y de todo lo que paso, me escondí de todos-
-No, no debes sentirte así, no fue tu culpa, nada de lo que pasó fue tu culpa-ella llora más fuerte al oírme-Y sobre no lo otro, esta bien, entiendo, gracias por decirmelo-
Algo suena en la puerta detrás de mí pero cuando me volteo no veo nada, segundos más tarde escuchó como se abre y se cierra la puerta principal y creo que sus amigos se han ido.
