The Loud House - La luz de mi Vida [Ronniecoln/Lobby]

Capitulo VIII: Reparaciones y Sorpresas.

Bobby caminaba directamente hacía la dirección que Eddie le había proporcionado el día anterior. Después varios días en Royal Woods, parece que finalmente había logrado conocer a la perfección la pequeña ciudad. Con forme se iba acercando a lo lejos podía ver un letrero con la leyenda "Taller Automotriz Los Guerrero's"

El lugar aún se encontraba cerrado, pero inmediatamente pudo reconocer al castaño quien se encontraba barriendo la entrada, vestido con un overol azul que portaba el logo del taller. En cuanto noto la presencia de Bobby solo alzo la mano para saludarlo.

—       Buenos días, Eddie —comento Bobby mientras se acercaba al Cataño.

—       Buenos días, Bobby — contesto mientras un gran bostezo se escapaba de su boca.

—       ¿una mala noche? — pregunto curioso al ver el estado de su amigo.

—       Yo no diría eso. Tuvimos varias serenatas, así que fue una noche productiva.

—       ¡Vaya, suena divertido! ¿Quiénes fueron los afortunados de recibir tus serenatas? —preguntó Bobby con una sonrisa, mostrando interés en la noche llena de música de su amigo.

Eddie dejó la escoba a un lado y se apoyó contra la puerta del taller, estirando los brazos.

—       Tuvimos dos cumpleaños y tres serenatas de reconciliación. Créeme, te sorprendería la cantidad de personas que siempre contratan serenata para pedir perdón.

—       Es fascinante cómo la música puede ser una forma tan poderosa de expresar emociones y buscar la reconciliación. Supongo que todos necesitamos un poco de romanticismo en nuestras vidas, ¿verdad?

Eddie asintió, sonriendo.

—       Definitivamente. A veces, una melodía bien ejecutada puede suavizar incluso los corazones más duros — comento con pasión mientras chasqueaba sus dedos

—        Y dime ¿pudiste hablar con tu padre? — comento Bobby cambiando de tema.

Inmediatamente Eddie cambio su semblante a uno más serio.

—       Te tengo una buena y una mala noticia.

Bobby frunció el ceño, preocupado por la respuesta de Eddie.

—       Entiendo. Comencemos con la buena noticia entonces.

Eddie suspiró y miró a Bobby directamente a los ojos.

—       La buena es que él está de acuerdo en que trabajes en el taller con nosotros.

Bobby se sorprendió gratamente por la noticia y una sonrisa se dibujó en su rostro.

—       ¡Eso es genial, Eddie! Me alegra escuchar que tu padre está de acuerdo en que me una al taller. Estoy emocionado por esta oportunidad.

Eddie asintió, compartiendo la emoción de Bobby.