Puse una mueca al sentir cómo Edna jaló mi cabello al peinarme. No estaba segura de ser capaz de acostumbrarme a esto de ser atendida. En la semana que he pasado aquí me he percatado de determinados asuntos con respecto a esta nueva realidad. Primero —ya no tengo duda de ello—, estoy en el mundo de la novela; una parte de mí esperaba despertar del sueño en cualquier momento. Segundo, el único y exclusivo propósito de Sol consistía en ser la esposa de Carlos; en parte comprendo que este mundo de mentalidad atrasada obliga a la mayoría de las mujeres a aspirar solamente al matrimonio, pero existen casos —como mi adorada Mariana Sharon—, donde la mujer tiene la posibilidad de ejercer cargos que antes solo eran ocupados por hombres. Por eso, hubiera sido más interesante que Sol hubiera mandado al carajo a Carlos para seguir metas propias. Pero, por supuesto, si hacían eso, la villana hubiera sido mejor que la protagonista. Tercero, esto es algo que he escuchando de la servidumbre —famosa por saberse los chismes de todo el mundo—, al parecer Sol, en algún momento de su infancia, aseguró estar enamorada del príncipe del Reino de la Lluvia. Por ejemplo el otro día:
—La señorita Sol no ha sacado el tema sobre el príncipe del Reino de la Lluvia. —comentó una de las criadas mientras limpiaba una habitación. Estaba tan enfrascada en su trabajo y en el chisme que no se percató de mi presencia cerca de la puerta.
—Es verdad, ya temía que la señorita se enamorara de ese jovencito. —mencionó otra, con una mano en la escoba y el oído en la habladuría.
No fue en una única ocasión. Hace dos días, mientras leía un libro de Modales en el jardín, también llegó a mis oídos cierta conversación.
—¿Cuál es el problema? Él es un príncipe ¿no? —dijo una sirvienta a otra mientras regaba las plantas.
—¿Problema? No, no es que haya problema; si la señorita Sol desea casarse con alguien de un reino vecino, puede hacerlo sin tapujos —admitió su compañera, recogiendo hojas secas—. La cuestión es que, hay rumores de que el príncipe del Reino de la Lluvia es un tanto peligroso, dicen que es muy violento y cada vez que sale a cazar con su padre, logra matar él solo a los lobos de la montaña.
—¿Eh? ¿Pero lo que tiene no son 12 años? —murmura la empleada algo asustada.
—Sí, me preocupa la señorita. ¡Vaya que enamorarse de alguien como él! Ahora solo es un niño, pero en el futuro...
¿Sol enamorada del príncipe del reino lluvioso? —posteriormente rey Reinhard—. Jamás mencionaron eso en la novela; de hecho, era él quien la quería a ella, por eso rechazó tantas veces a la protagonista. ¿Será que fue un amorío de la niñez tan insignificante que no tenía que ser mencionado en la novela?
—¿Qué hay de lo que dijeron las sirvientas? Eso de que es un tanto peligroso. —puntualizó Diabla, haciendo aparición.
En la novela él es un personaje que aparece solo para ser el primer amor de Emma, no es un personaje principal, solo un simple extra que mencionan unas cuántas veces, pero nunca hay una escena específica donde lo describan.
—¿Nunca apareció? Eso significa que no intervendrá en nuestro trágico final. —Esa fue Ángel.
Pero, hay algo que mencionaron en una escena, fue cuando Carlos tenía que reunirse con Ares en el Reino de la Lluvia. En ese momento, un sirviente le informó sobre su personalidad.
“Un rey sádico, perfecto y atemorizante”.
Bueno, si es un personaje extra, da igual.
—Señorita, hemos terminado, ¿le gusta?
Me miré al espejo. El sombrerito rojo combinaba con el pequeño vestido de lazos blancos que me habían colocado. Me quedé apreciando los guantes negros, los cuales tenían bordados una rosa. No lo entiendo, soy una niña de 10 años, ¿no es impropio que vaya vestida de rojo, pues este es el color del "pecado"? Ah, cierto, mi madre es Lilian Hayden, la "destruye reglas".
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La Villana Merece un Final Feliz.
Fantasia¡A la basura el amor y los sentimientos! Si me traicionan no tengo por qué perdonar a nadie. ¿Qué soy? ¿Un Dios que perdonará todos los pecados? Un día desperté en el cuerpo de la villana de la última novela que leí. Soy la hija de un duque, tengo b...