Mi Sangre |Chaesoo

~|章65|~

No pude dormir bien porque el peso de Jisoo sobre mi pecho, básicamente me dejó sin aire toda la noche, sin embargo, no me queje o perdí la postura en la que amanecimos apachurradas luego de verla con los ojos cerrados encima de mi, al parecer los ungüentos que use en sus heridas terminaron cedandola porque se lo pregunté a Nayeon a través de un texto y me lo confirmó. Entonces no pude hacer más, salvo suspirar como tonta al verla "dormir" tan plácidamente sobre mi pecho como un pequeño conejito, tan hermosa y tan mía luego de innumerables días separadas, no obstante, mi enojo por los hechos no se ha ido por más que tenga el impulso de corresponderle a cada una de sus intenciones, por lo tanto, voy a contenerme lo más que pueda o simplemente dejará de lado fácilmente todo lo que le reclamé.

En esta ocasión no permití que la alarma sonará y la apague mucho antes de la hora habitual porque de verdad considero que necesito tomar aire y despejarme, por lo que me moví despacito y con mucho cuidado del agarré posesivo de Jisoo y finalmente logré sentarme en la cama y estirarme un poco. De verdad pesa mucho a pesar de que es sumamente delgada y tan... joven. Suspiré profundamente mientras le acariciaba el cabello, estoy segura que cualquiera que la conozca va a pensar que realmente tiene los diecisiete años que ha venido conservando al pasar del tiempo; no tiene un solo defecto en su piel, todo lo contrario, es tan tersa, pálida y suave. No pude resistirme un segundo más y le dejé un pequeño besito en los labios y luego me levanté de la cama contenta. Luego de ello y como si me estuviera espiando, recibí un mensaje de Lisa, en el que me pedía que salieramos a trotar un rato, así que confirme su invitación de inmediato porque también necesito hablar con ella.

No tarde más de diez minutos en ponerme algo deportivo, arrope bien a Jisoo y luego salí de la habitación encontrándome con mi mejor amiga justo en el pasillo en mi espera, quien luce peor de ojerosa que yo.

──¿No dormiste bien? ─soy la primera en preguntar.

──No, me la pasé discutiendo toda la noche con Jennie hasta que se quedó fundida en esa cama y luego llore mucho, debio ser por eso. ─fija su mirada al frente. ──Bueno, salgamos de aquí para poder hablar más cómodas. ─me abraza mientras descansa su cabeza en mi hombro.

Continuamos en silencio hasta que finalmente conseguimos salir de la casa bajo la mirada atenta de varios individuos pálidos. Puede ser que les sorprendiera mucho que no sean ni las seis de la mañana y ya estemos deambulando por ahí, pero verdaderamente y coincidencialmente Lisa y yo estamos pasando por los mismos sentires.

En cuanto tomamos la distancia apropiada, comenzamos a trotar hacia el terreno donde suelen hacer los juegos de esparcimiento y nos dispusimos a bordearlo.

──Tú también lloraste mucho, puedo darme cuenta con facilidad. ─comenta. ──Venga ese ánimo, hace mucho tiempo que no te ejercitas de está manera.

Tiene razón, pero ésto es muy díficil para mí y mi cuerpo débil, aunque sé que me hace bien, pero...

──P-Por supuesto que fuí un mar de l-lágrimas. ─ya comencé a sudar, Dios. ──Pero sobre t-todo de enojo porque Jisoo es una inconciente y también una mentirosa porque no le creo del todo esa historia que me contó.

──Yo tampoco les creo una mierda, porqué conozco bien a Jennie y estaba muy nerviosa mientras hablaba. ─Lisa disminuye la velocidad en su andar y lo agradezco.

──Esa parte en la que hablaba de la supuesta bruja fue muy inconclusa y... a-además, Jisoo dice que nunca estuvo enterada del ataque que recibí en la cafetería. ─niego con mi cabeza y mi cola de caballo se ondea de lado a lado.

──Exacto, y en verdad estoy asombrada con eso de qué la matriarca, ¡la matriarca! ─sube la voz haciendo énfasis en ello. ──La mujer más anciana, sabia y transparente del clan se haya atrevido a mentirnos en toda la cara con tal de cubrirlas, eso definitivamente no me lo creo. ─niega. ──En las brujas hay mucho honor, y no por tratarse de Jennie y Jisoo puedo concebir que se se haya atrevido a romperlo.