Mi Sangre |Chaesoo

~|章135|~

Dormí algunas horas muy cómodamente porque realmente nuestra cama es sumamente plácida y los brazos de mi amor son calientitos.

Nuestra cama es increíblemente cómoda.

El día que la elegimos, Jisoo se encargó de ello al ser excesivamente exigente, por eso ahora más que nunca duermo muy bien y se lo agradezco.

Al abrir mis ojos con pereza inmediatamente oí algunas voces, por eso, intuí que ya habían llegado las visitas y Jisoo estaba inmersa en ellas.

No quise molestarla de más, por eso, con lentitud, qué es como hago todo ahora por el embarazo, comencé a incorporarme hasta conseguir sentarme en la cama.

No obstante, cuando se trata de vampiros y seres sobrenaturales super dotados intentar ser silencioso es inútil.

Completamente inútil.

Por esa razón, oí un golpecito delicado en la puerta de mi habitación.

──Si, pasé. ─dije mientras me acomodaba el saco calientito adecuadamente en el vientre.

Entonces, luego de mucho tiempo observé allí a Sophie de pie muy sonriente abriendo la puerta.

──¡Hola, Sophie! ─la saludé muy animada. ──Acércate.

──¡Hola, Rosé! ─al acto me abrazó con mucho cuidado y calidez. Ella también es calientita como cualquier alfa. ──Me alegra muchísimo volver a verte. De verdad.

Luce increíble. Tan jovial y elegante como siempre.

──Disculpa que haya sido tan atrevida y haya venido hasta tu habitación, pero no podia soportar las ganas de verte. ─se agachó frente a mi y luego me miró desde abajo. ──Queria felicitarte. De verdad estoy muy emocionada por ustedes. ─tomó mi mano. ──Me alegro profundamente que hayan podido resolverlo y estén juntas de nuevo. Es magnífico, Rosé.

Parece más un agradecimiento.

Imaginó que ella también tuvo que lidiar con el mal humor y la tristeza de Howl por las crisis de Jisoo mientras estábamos separadas; ellos son muy unidos después de todo.

──Significa mucho viniendo de ti. Gracias, luna Arkwright. ─respondí entusiasmada y con jugueteó buscando levantarme.

Ella soltó una risita baja.

──Déjame ayudarte, por favor. ─Sophie me ayudó a ponerme el calzado de casa. ──Jisoo me permitió venir con la condición de que te ayudará mucho, mucho. Aunque no debe, claro. Te habría ayudado aunque no me lo pidiera. ─negó riendo mientras se ponía de pie. ──Siempre luce muy nerviosa cuando se trata de ti. 

Awww, Jichu. Mi bebé hermosa.

──Tengo que decirlo. Soo luce muy cambiada. ─agregó Sophie con optimismo. Le agrada. ──¿Qué tal va todo? ¿Cómo está tú cachorrito?

En cuanto preguntó mi corazón pálpito contento por su emoción.

Cada vez que alguien lo menciona es una sensación radiante y muy satisfactoria para mí en lo que respecta a su aceptación y mi deber como madre.

──Él está muy bien. ─me llevé ambas manos al vientre. ──Los dos estamos muy saludables gracias a Jisoo. El bebé ha crecido mucho como te das cuenta. ─mi comentario fue irónico y las dos reímos. ──Es una experiencia increíble...

──Claro. Ya lo creo. ─Sophie carcajeó mientras salíamos de la habitación. ──Se te ve muy encantadora, luna. Has cambiado.

──Oww, gracias. Hemos pasado por mucho realmente, pero lo importante es que estamos luchando día a día y estamos bien. Todo ha ido de maravilla últimamente. ─fuí sincera y ella asintió.