Mi Sangre |Chaesoo

~|章69|~

Una vez llegamos a la casa de Yera, nos recibió la señora Abril, quien inmediatamente notó el malestar de Hyeri y comenzó a cuidarla; primero hizo que se diera un baño caliente y luego nos dio un té a las tres que instantáneamente logró calmar nuestros nervios. De modo que no pudimos ocultarle a la señora Abril lo que pasó porque nuestro estado de ansiedad y nervios nos delato fácilmente, no obstante, ella no nos dio ningún sermón, sino que por el contrario se mantuvo consintiendo y consolando a Hyeri, y una vez llegó Dahyun con su energía arrolladora y positiva nos dimos por bien servidas al dejar a nuestra amiga bajo su cuidado, entonces nos fuimos de allí a paso lento. En verdad me sentí pérdida y muy asustada y con una horrible sensación de que alguien nos estaba siguiendo a medida que caminábamos de regreso. Lisa no dijo mucho porque continuaba sintiéndose muy triste y también muy culpable por lo que pasó, sobre todo por haber decepcionado a Jennie.

Cuando llegamos a la casa, el camino a las habitaciones fue muy corto, parecía como si la ansiedad y los nervios hubiesen vuelto, mis manos temblaban y el aspecto de Lisa era de total palidez. Antes de entrar a la habitación de Jennie me dio un abrazo muy fuerte donde sentí su preocupación y necesidad así que le correspondí de la misma manera y luego entre a la habitación de Jisoo, dónde inmediatamente su aroma me cubrió entera y el hormigueo del acecho desapareció como por arte de magia, sin embargo, la tristeza y el dolor no desaparecieron un solo minuto. Tomé una ducha y mientras me bañaba no pude evitar llorar de culpabilidad, mi cuerpo temblaba y cuando me miré al espejo tan solo pude ver la imagen de Willa una y otra vez sufriendo, entonces huí del cuarto de baño prácticamente corriendo y de la misma manera me puse el pijama, luego tomé el borde del tendido de cama y me metí debajo de él intentando pensar en todas las sensaciones positivas que mi alfa me proporciona respirando hondo una y otra vez.

La extraño, pero también sé que sigue muy molesta conmigo, entonces me dispuse a calmar a mi mente tomando un libro y comenzar a leer dejarme llevar por la preciosa lectura; esté es uno de los muchos que debemos leer como encargo de la universidad así que hacerlo desde ya me viene bien y me tranquiliza. Continúe en la misma postura hasta que finalmente me dio algo de sueño, por lo tanto, revise la hora en mi celular, once y cinco, ya es demasiado tarde y Jisoo no llega, tal vez y no vaya a venir hoy, sin embargo, la angustia y la zozobra me destruyen, de verdad odió cuando no me dice el motivo de sus retrasos.

Mis parpados se cerraron por un instante y de pronto me ví en el calabozo deambulando y corriendo asustada mientras alguien me perseguía y me desperté pegando un pequeño salto en la cama, me sentí tal y como en aquellos momentos en los que da parálisis del sueño. Mi pecho subía y bajaba rápido, pero gracias a las luces tenues que iluminan la habitación logré calmarme ligeramente, no obstante, realmente estoy completamente despavorida ahora que soy consciente de que el peligro tan solo está a unos cuantos metros de mí.

──Hola. ─Jisoo aparece por la puerta principal, por lo que le agradezco a Dios que finalmente haya oído mis plegarias y la haya traído a mí. ──¿Estás bien? ─al momento apareció de pie en la parte inferior de la cama.

──Hola, mi amor. S-Sí, lo estoy. No te preocupes. ─miento controlando mi respiración para que no lo noté por ahora.

──Sigues nerviosa. ─asegura. ──Imaginé que ya te iba a encontrar durmiendo. ─comienza a desnudarse para ponerse la pijama. De verdad que la vista siempre es digna de contemplar. ──Ya es de madrugada.

──Bueno sí, pero quería esperarte y de todas formas no podía dormir bien. Se me fue el tiempo leyendo. ─digo en voz baja, ahora la veo ponerse unos shorts y como siempre decide usar solamente un top o simplemente una camisa muy holgada.

──No quería llegar tan tarde pero necesitaba tiempo. ─enuncia mientras camina con lentitud hacia mí. ──Lo lamento mucho por dejarte sola por tanto tiempo. ─toma asiento a mi lado e inmediatamente tomó su mano. ──Jen me sorprendió bastante porque de repente decidió beber mucho, así que me quedé a cuidarla un rato.