Sentimientos paralelos (Draco Malfoy, Fred Weasley y tú)

Capítulo 15.- Una simple sesión de estudio

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Desperté y sentí que alguien me observaba, al girarme pude distinguir que se trataba de Fred, quien estaba acostado junto a mí. Me ruboricé al verlo tan de cerca, pero luego razoné un poco... ¿Dónde estaba y qué hacía Fred a mi lado? Miré las cortinas y la habitación, todo estaba rodeado de dorado y escarlata, entonces comprendí: ésta era la común de los leones, pero, ¿qué hacía aquí? Noté que Fred se estaba levantando y me giré un poco.

—Será mejor que te levantes si no quieres llegar tarde al desayuno. — Al observar la habitación me percaté de que estaba vacía y todas las camas hechas, Fred me extendió mi uniforme. —Ten, yo usaré el baño para que te vistas con tranquilidad. — Yo gesticulé una leve mueca.

—Fred... — Me miró. —¿Qué hago aquí? — Pregunté desconcertada.

—Te quedaste dormida y en toda la noche dormiste perfectamente. — Me di cuenta de que era cierto, mis ojos no se sentían cansados y no recordaba haberme despertado en toda la noche.

—Supongo que fue por la compañía. — Dije viendo la diferencia entre aquella noche y las otras.

—Anda, vístete. — Insistió.

—Fred... — Él volvió a mirarme. —¿Cómo llegó mi uniforme aquí? ¿Dónde están tus compañeros? — Él se acercó y tomó mi rostro.

—Sólo vístete y ten un excelente día, tus preguntas, si es que aún las tienes para entonces, las contestaré a la hora de estudio. ¿Ok? — Asentí y de nuevo entró al baño, yo me cambié de manera rápida, notando que estaba mi cepillo y mi perfume favorito, por lo que cepillé mi cabello y rocié mi uniforme, Fred salió del baño y olfateó la habitación.

—Lindo aroma... — Elogió

—La habitación huele a chica. — Dije con un tono de disculpa y reí.

—Estaremos bien. — Me dio mi mochila. —Ya contiene lo que necesitas durante tu día y tus trabajos. — La tomé, miré alrededor y recordé... Corrí al escritorio y lo noté vacío.

—¿Y lo de pociones? ¿Dónde está? — Él se acercó, tomó mi brazo e hizo que le mirara.

—Está en tu mochila; Completo y listo para entregar. — Lo miré asombrada

—¿Lo terminaste? — Asintió. —¡Oh! Fred, no tenías porque hacerlo... — Bajé mi mirada al suelo y le sonreí. —Muchas gracias. —

—No hay nada que agradecer... — Soltó mi brazo. —Recuerda traer los ingredientes, el profesor Snape me los autorizó anoche, sólo pídeselos. — Asentí y comenzamos a caminar de salida. —Hoy estás descansada, por lo tanto presta atención lo más que puedas a tus clases y Hermione será muy amable de prestarnos las anotaciones de clases en las que te has quedado dormida en su presencia, pero hay algunas en las que no se ha percatado. ¿Le pedirías sus anotaciones a Malfoy? —

—Sí, claro... — Miré a todos en la común que me miraban sorprendidos, porque ¡claro! suelo venir a horas normales con ropa normal y ahorita salgo a una hora extraña con uniforme, a pesar de eso sólo me miraron unos segundos, me di cuenta que los Gryffindor solían ser curiosos, pero prefieren enterarse después en lugar de ser una bola de indiscretos, salimos por el retrato y Draco me esperaba fuera, por reacción propia quise correr de nuevo dentro, pero Fred tomó mi espalda impulsándome a seguir adelante.

—Bien __________, nos veremos más tarde. — Me dejó con Draco y se reunió con Lee, George, Caroline y Angelina.

—¿Cómo dormiste? — Preguntó Draco.

—Bien... — Respondí insegura no sabiendo si era correcto decirle aquello, pero si estaba afuera y Fred no me ocultó supuse que él estaba enterado.