Sentimientos paralelos (Draco Malfoy, Fred Weasley y tú)

Capítulo 63.- Hay que casarnos

Dedicado a: pazamor_ y
LaMorenaBeiah

-¿Mañana mi señor? - La pregunta resonó en el eco de la enorme habitación, Lucius había sido quien había hablado, la pareja Malfoy se miró entre sí, compartiendo una angustia que los más jóvenes jamás habían podido ver en ellos.

-¿Algún problema, Lucius? - Preguntó la voz fría. Él se levanto de la mesa y los más grandes levantaron la cabeza con él al mismo tiempo, Draco y __________ imitaron la acción, viéndose prontamente uno al otro, ambos demostraban estar claramente aterrados por la noticia tan inusual.

-No, mi señor. Sólo que ambos aún son menores de edad. - Intentó explicar el rubio sin mirar a otra persona que no fuera Gerekhi que estaba frente a él, completamente inmutable.

-Por supuesto, pero no se casarán ante nuestra ley actual, eso sería irresponsable y sospechoso. Pronto seré yo quien dicte lo que es correcto en el mundo mágico y lo que quiero ahora es que ellos juren lealtad a su matrimonio y a mí. Su boda será su ceremonia para recibir la marca tenebrosa, por lo que ambos harán un juramento inquebrantable. - Explicó sin ninguna clase de prisa, haciendo las pausas necesarias para mantener la tensión entre sus acompañantes.

-Pero entonces, si no se hace el papeleo correspondiente mi apellido no podría cambiar a Malfoy, seguiría siendo Lodge. - Nuevamente un apretón de parte de su madre y en esta ocasión le acompañaba una mirada severa. ___________ se mordió la mejilla en reprensión propia ¿acaso quería problemas?

-Le gusta la polémica ¿no es así señorita? - La pregunta había sido de forma muy educada, pero tenía un deje de fastidio, haciéndole entender a la joven que estaba siendo muy inoportuna. -Y aunque tiene razón, le repito que pronto yo seré la nueva ley, así que, apegándonos a vivir desde ahora nuestra pronta realidad, mañana oficialmente será Malfoy, aunque en el colegio le sigan diciendo el apellido Lodge. ¿Ha comprendido? - ___________ tragó duro sintiendo como la helada mano de aquel hombre le rozaba la espalda, causándole un escalofrío. Él no retiró su mano hasta que ella asintió.

-S-sí. - Respondió con nerviosismo.

-Sí... ¿Qué? - Una opresión en su pecho la invadió, él la miraba fijamente.

-Sí, mi señor. - Dijo con decisión y miedo reflejado en su mirada. Voldemort sonrió "satisfecho" y prosiguió por sentarse en su respectiva silla.

-Soy generoso, por lo que podrán organizar la celebración como ustedes siempre anhelaron, tendrán el día de mañana para preparar todo. Por supuesto, sólo los mortífagos y las nuevas generaciones de éstos serán quienes puedan asistir. - Advirtió e hizo una mínima pausa. Nadie dijo nada, otorgando el silencio en una aceptación. El señor tenebroso asintió satisfecho antes de continuar con un tono levemente amenazante. -No me decepcionen, estoy seguro de que ambas familias tienen muy buen gusto. ¡Oh! Y espero no les moleste, me he adelantado a enviar las invitaciones correspondientes. Esta reunión ha finalizado. - Los adultos asintieron y arrastraron sus sillas hacia atrás, al estar de pie mostraron una reverencia sincronizada y comenzaron a salir uno a uno. Los menores, desconcertados, evadieron el rostro de aquel sujeto y le reverenciaron únicamente con la cabeza sin saber cómo actuar, saliendo detrás de sus padres.

Todos caminaron en silencio hasta llegar a las escaleras del vestíbulo, Lucius miró a todos y con una sutil seña le indicó al pequeño grupo que le siguieran, llevándolos hasta un salón que claramente usaban para beber té. __________ no recordaba haber entrado ahí nunca.

Luego de haber ingresado con la mayor discreción posible uno detrás del otro, el rubio mayor cerró la puerta con cuidado y sin el menor ruido. En seguida, sacó su varita y lanzó un hechizo silenciador a la puerta.