Sentimientos paralelos (Draco Malfoy, Fred Weasley y tú)

Capítulo 24.- Terminamos

Ella seguía ahí como lo esperaba, aunque no la encontró de la manera que quisiera. La chica dormía plácidamente en el suelo del invernadero, respirando tranquilamente y sin nadie que la molestara, hacía tiempo que no dormía de ese modo. Draco se acomodó junto a ella y la cubrió con su túnica por la falta de temperatura en el lugar, sentía un enorme pesar... Nada salía bien desde hacía bastante tiempo y él comenzaba a sentirse la persona más maldita en el mundo. Se acomodó a su lado, tan sólo mirándola, sin ninguna clase de tacto pues podía levantarse sobresaltada.

Así pasados varios minutos sintió un leve movimiento por parte de ella y se mantuvo tieso esperando no despertarla, estaba seguro de que casi no había dormido gracias al insomnio que sufría desde el grado anterior, un momento de paz era lo que ella siempre buscaba, así tuviera que saltarse algunas clases. La chica bostezó y enseguida miró a Draco, antes de que él pudiera hacer nada ella se alejó como un resorte, tal cual si el chico quemara como el mismo infierno.

—¿Qué es lo que haces aquí? ¿Cómo entraste? La puerta estaba atrancada... — Fue lo primero que preguntó, no estaba nada contenta con él y estaba casi segura de que explotaría.

—Yo sólo... Mizore me dijo que... — _________ le interrumpió.

—No me menciones a esa rata. — Gruñó enojada. —¿Cómo entraste? — Volvió a preguntar.

—Bueno, vine para hablar contigo pero estabas dormida. Entré con un alohomora. — Respondió y la chica se chocó la palma contra la frente repitiéndose una y otra vez "estúpida", por no haber puesto más hechizos de seguridad.

—¿De qué quieres hablar Malfoy? Creo que quedamos bastante claros hace un rato en el pasillo. — Se quitó la túnica del chico y caminó hacia la entrada mientras hablaba. —Mira que ahorita recuerdo y tengo muchas cosas que hacer. —

—No, espera. — Tomó su muñeca deteniéndola, esta la apartó con brusquedad.

—¡NO ME TOQUES! — Chilló dando traspiés y respirando con suficiencia, su cabello tomó un ligero color gris. Draco anonadado se separó un poco.

—Hace mucho que no te ocurría una transformación involuntaria. — Susurró preocupado. _________ enseguida tomó su color de cabello natural.

—Olvídame de una maldita vez, ya no quiero saber nada de ti, ¿me oyes? Haré que mi padre cancele el tratado y podrás tenerlo felizmente con Astoria, tal vez con Nara... Al fin de cuentas ambas son sangre pura, o al menos eso parecen, ¿qué más da que sea yo a una de ellas? — Caminó con paso firme lo que le quedaba de camino hasta la salida del invernadero, el rubio la siguió sin pensárselo dos veces.

—¿Y crees que eso es lo que yo quiero? — Preguntó detrás. —¡_________! — La mencionada se giró bruscamente y caminó hacia él encarándole.

—¡Estoy harta de que siempre deba ser lo que tú quieres! — Le señaló con cierto sentimiento de culpa, directo a la cara. —Draco quiere una escoba: ¡Hay que comprarla! Draco quiere una esposa: ¡Hay que conseguirla! Malfoy quiere alguien con quien pasar el tiempo aparte de su esposa... — Hizo una pausa y respiró hondo. —Que lo haga. Después de todo, ya tenemos el contrato. — Finalizó con un hilo de voz.

—Jamás he pensado de esa manera. — Murmuró.

—¿Eso crees? — Las lágrimas de la chica comenzaban a brotar. —Pues no es lo que demuestras. —

—_________. —

—No me digas "_________" en ese tonito, no vas a convencerme de nada. Lo nuestro se acabó Draco... — Le miró directo a los ojos, decidida y llena de lágrimas.