CAPÍTULO 55: "MUCHA SUERTE".

280 45 0
                                    


Tomó el documento entre sus dedos temblorosos y se aseguró de recoger todas las cosas que habían caído, poniéndolas sobre el escritorio.

Entre las cosas que había dentro de la caja, PJ pudo identificar una pequeña manta, una sonaja, un par de zapatos pequeños de bebé y el documento de adopción que le aceleró el corazón.

Sus esperanzas de que todo fuera una confusión cayeron al suelo, al leer la fecha de su nacimiento en el documento.

No le gustaba sacar conclusiones precipitadas, sabía que eso podía causar confusiones sin razón... Pero todo parecía indicar que ella era adoptada.

Su mente comenzó a trabajar a la velocidad de la luz y PJ recordó todas las veces en que se sintió fuera de lugar.

Recordó todas las veces que sintió que no encajaba; ni en la sociedad estadounidense, ni en sus raíces venezolanas.

Sintió que todas las cosas comenzaron a caer en su lugar, como si fuera un rompecabezas.

Se le hizo un nudo en la garganta de sólo pensar en que ni siquiera tenía claro quién era.

Las lágrimas lo humedecieron el rostro a más no poder y su cabeza comenzó a palpitar por la presión de contener el llanto.

Leyó al menos cinco veces el documento, intentando encontrar algo que le dijera que estaba equivocada... Pero los datos eran los mismos, sin importar cuantas veces lo leyera.

El nombre de la pequeña la que habían adoptado era "Daniela", su fecha de nacimiento era la suya propia y también parecía ser el mismo tipo de sangre.

PJ intentó calmarse y dominar sus emociones; recogió todas las cosas de nuevo en la caja y guardó en su bolsillo el documento de adopción.

Revisó dentro de la caja fuerte y consiguió la que se suponía era su acta de nacimiento, de la cual ahora estaba dudando gracias a lo que se había conseguido.

Una vez que tuvo el acta de nacimiento en sus manos, cerró la caja fuerte y la regresó al lugar del que la había sacado.

Ni siquiera se fijó si recogía bien las cosas de la oficina o si había cerrado la puerta, simplemente salió de allí con rapidez y se dirigió a su habitación.

No lo pensó dos veces y marcó el número de Dane.

Él atendió al cuarto tono, justo cuando PJ había comenzado a pensar que no iba a atender.

—Disculpa que tarde en contestar, cariño... Justo estaba reunido con un agente que contraté para la investigación de... ¿Estás llorando?—preguntó preocupado al escucharla sorber por la nariz.

—Es que acabo de descubrir algo... Necesito verte. No quiero contarte por acá.—dijo ella con la voz ronca por el llanto, mientras luchaba por no ahogarse con el nudo que tenía en la garganta.

—¿Prometes que estás bien?—preguntó él.

—Si, estoy en mi habitación... Por suerte mis padres no han despertado, si lo hacen se darán cuenta de lo que encontré.—dijo y Dane suspiró.

—Dame unos diez minutos, cariño. Intentaré de llegar lo antes posible. —dijo él y PJ colgó la llamada.

PJ se cambió la pijama por algo un poco más abrigado, e intentó controlar las ganas tan fuertes de llorar que tenía... Lamentablemten, conforme pasaban los minutos, el nudo en su garganta aumentaba de tamaño amenazando con ahogarla.

En su mente buscaba mil y ún razones por las que ese papel pudiera estar ahí... Rogaba al cielo que no tuvieran que ver con ella; pero al final se decía que no podía ser coincidencia todo lo que decía ese bendito papel.

AMOR INESPERADO (FATE I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora