CAPÍTULO 7: JAURÍA DE LOBOS.

468 51 0
                                    

Una vez que logró recuperar sus lentes y ver en HD, se alejó con rapidez del área de los baños.

Ni siquiera sabía cómo procesar lo que había ocurrido en el baño.

Dane Hard le había caído muy mal desde el principio... Pero, siendo honesta, era el primer hombre con el que tenía un acercamiento de ese tipo y que le hacía sentir esas sensaciones.

Se sentía avergonzada y curiosa, pero decidió no pensar más en eso.

Lo mejor sería no volverse a chocar más con ese hombre.

Caminó hasta el área de recepción, con la intención de regresar a su oficina, pero justo cuando saludó a Monique fue interceptada por Peter.

Lucía azorado y tenía la corbata desatada... Lo que honestamente le daba un aire sensual, pero PJ se dijo que debía de silenciar sus hormonas.

Volvió a la realidad, cuando notó que Peter tenía un gran ceño fruncido y parecía desesperado.

—¡¿Qué tan posible es que me diseñes todo desde cero?!—preguntó hablando con un tono de voz más alto de lo normal.

PJ abrió los ojos exageradamente.

—¿Desde cero?— preguntó bastante sorprendida. Peter soltó un "chist" y se llevó el dedo índice a la boca, silenciándola.

—¡Nadie puede saber!—siseó él y la llevó a un espacio lejos del público. Miró a ambos lados, asegurándose de que nadie se acercara.

—Para empezar, tú gritaste primero. —se defendió ella.

—Sí, tienes razón... Lo siento, es que estoy con los nervios alterados. —se justificó Peter. —Volviendo al proyecto...—continuó diciendo y PJ negó rápidamente.

—Es casi imposible. Se requiere de mucha investigación; mucho qué escribir y diseñar.—explicó, pero luego recordó algo. —Aunque creo que estás de suerte. —agregó.

De no ser porque en mi tiempo libre diseño campañas de publicidad, creo que Peter estaría jodido. Como totalmente jodido, se dijo sintiéndose una heroína con capa y todo.

—Más vale que estemos de suerte... Tu ascenso está pendiendo de un hilo, si me remueven de la presidencia hoy estamos totalmente fritos.—dijo cerca del rostro de la morena y ella sintió cómo se sonrojaba ante la cercanía.

Jodeeerrr... No quiero que mi cabeza ruede tan rápido por el suelo de X.O. Woods, pensó ella.

—Creo que puedo ayudarle, Peter.—dijo con más seguridad y la miró como si fuera su salvación.

—Eres mi amuleto de la suerte. —aseguró él y tomó la mano de PJ para darle un beso rápido en el dorso. Ella luchó por ignorar las cosquillas que le causó el gesto, necesitaba enfocarse en salvarle el trasero a Peter... Y salvar el suyo propio en el intento.

Subieron apresurados al ascensor y marcaron el piso que correspondía a las oficinas de presidencia.

Y, como cada vez que entraba al recibidor de presidencia, ella se asombró ante el ambiente de ese piso... Aunque Peter ni siquiera le dio chance de procesar su salida del ascensor, pues la tomó de la mano, tirando de ella hacia el interior de su oficina.

Antes de entrar en la oficina, PJ vislumbró su futuro puesto (del que Peter le había hablado). Estaba vacío, ahí en el área de recepción del piso. También notó una puerta que estaba justo al lado del puesto y pensó en que no podía ser un baño. PJ sabía que la oficina de Peter tenía baño dentro... Concluyó que era una oficina.

AMOR INESPERADO (FATE I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora