Capítulo 66

3.6K 205 173
                                        

Hi, cuties! Me paso brevemente para agradecer a todos por sus hermosos mensajes en el capítulo anterior y decir que, aunque rara vez conteste, me los leo todos y cada uno y créanme que son motivo de mi absoluta alegría. Espero seguirlos leyendo en los próximos capítulos que, sí, serán publicados cada domingo, y también en las otras historias que ya estoy en tarea de retomar. Los invito a seguirme en Instagram, donde hay más interacción, mi usuario es el mismo de aquí, y en Ko-fi.

Ahora sí, disfruten de la lectura.

————

Bloody Love

Capítulo 66
La Maniobra de Kaley

KALEY

A pesar de no ser parte de mi manada, la alianza entre Alfas hace que también pueda usar la comunicación selectiva con los miembros de la manada de Crawford, así que, al darme cuenta que es quien está más cerca, lanzando una a una sus balas con gran precisión desde detrás de un tronco casi en la última fila de ataque, llamo a Lars. Ojos azules de pupilas alargadas caen en mí y creo que incluso antes que termine de hacer la seña ella ya sabe que estoy ordenando preparase para lo que viene.

Tratando que su voz llegue a los oídos de nuestras tropas sin que se superpongan a las explosiones que rasgan la noche para que el enemigo no vaya a escucharla, esparce el comando entre los guerreros más cercanos a ella. Mientras tanto, hago lo mismo con Asher, y juraría que veo en sus ojos el mismo impulso de arremeter que yo siento, mas solo asiente y comienza a dar las instrucciones.

Más rápido que pronto, todos mis hombres saben lo que sucede, y el sonido de los pasos se vuelve más intenso conforme se avecinan.

Siento el rugido casi latir con la misma potencia que mi corazón en mi pecho, aguardando con gran ansia por el momento de ser dejado libre mientras reparto mi último cargador de BUV entre los enemigos. Mis tropas se han quedado mudas, y nuestro ataque ha disminuido su intensidad solo lo suficiente para dejar que el enemigo se envalentone a intentar avanzar, pero sin dejarlos hacerlo realmente, con intención de tomarlos con las filas desordenadas. Respirando fuertemente, notando incluso cómo la nieve se comprime bajo mis botas, la adrenalina, la sangre sobre mí, a mi alrededor, la vibración del arma entre mis manos que aun así no se siente tan letal como mis manos mismas.

Roth ordena el avance y los soldados al frente intentan ganar metros, cuidándose de nuestras balas y procurando mantenerse ocultos de las miras lejanas; Asher ordena la contención, así que los chupa-sangre tienen que frenarse cuando los proyectiles índigo brillante llueven sobre ellos. No obstante, me doy cuenta que no son tantos como en un principio: las BUV se están acabando, nuestra compañía no contaba con la cantidad más numerosa de esa munición.

Muchos de mis hombres en la primera línea tienen que retroceder entre maldiciones porque sus armas se han quedado sin la munición predilecta, llamando a otros en las filas traseras para cubrir los huecos con simples balas de plata. Si yo me he dado cuenta los Vampiros no tardarán en hacerlo, también. Como se percaten que nuestras balas ya no son tan terroríficamente letales se animarán a forzar el avance.

Una ofensiva tan intensa como la que ellos llevan consume mucha munición, está pensada para arrasar con todo lo que tengan de frente en el menor tiempo posible, para acabar la contienda pronto; así pues, como estamos resistiendo más de lo que ellos especularon, me arriesgaría a decir que están prontos a agotarse. No podemos gastar mucha más munición si queremos llegar bien al aquelarre, pero tampoco quiero arriesgar ordenar ataque cuerpo a cuerpo sin tener certeza de cuánta munición les queda, tampoco podemos dejarlos hacernos retroceder.

Bloody LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora