Cleyton 2

cap 279: con dos flores a cada mano

Cleyton saludo por un tiempo a Lady Treemane, la mujer siguio actuando como una dama elegante incluso cuando veia que dricela y Anastacia practicamente colgaban del cuerpo de el mismo. Cleyton tenia que admitir que esta mujer era realmente dura en cuanto a permanecer con su elegancia.

[Ejem, lady treemane, esto es lo que le pertenece de este ultimo mes, em, tiene que comprender que en invierno, no fueron las cosas tan bien como era de esperar, , por lo que el dinero no es tanto]

Cleyton saco de su espalda una bolsa de cuero grueso que tintineaba con el sonido de las monedas de oro.

*champ*

La bolsa de oro pesada se puso en la meza con aparentemente cientos de pequeñas monedas de oro de un tamaño pequeño, pero que juntas podrian valer casi una casa en la capital.

Cuando Lady Treemane miro la bolsa con oro, cleyton penso que por un momento habia visto monedas de oro en sus ojos. De hecho, esta mujer parece que paso su continua obsecion por querer que sus hijas se casen, a ahora tener una vida de mujer rica sin parar.

[Bien, gracias sir Stan, le agradesco su arduo trabajo]

Sonrio Lady Treemane mientras que la sirvienta tomaba la bolsa de oro, aunque cuando la tomo, parecio ser un poco mas pesada y casi se tambalea en l lugar, normalmente lady treemane se molestaria por este tipo de cosas pero ahora en lugar de molestarse, estaba bastante feliz de ver que esto estaba realmente pesado.

Despues de haber resibido su dinero, Lady treemane se alejo del lugar felizmente, Cleyton y las dos hermanas no tenian mucho que ver con ella, por lo que simplemente se alejaria y tomaria un te en algun otro lugar. En ese momento, el lugar quedo solo para cleyton y las dos hermanas, nisiquiera las sirvientas se quedaron en el lugar y la sala se habia convertido en un lugar privado para tres personas.

Sin pensar mucho ni esperar, Cleyton agacho la cabeza mientras veia a Dricela y comenzo a besarla con impaciencia.

Los labios suabes de Dricela fueron tomados, el sabor de la niña era increible, con un poco de dulce.

Despues de besar por un par de minutos, Cleyton atrajo hacia el mismo a Anastacia que tambien se habia convertido en una peqeña belleza peliroja y la beso una vez mas.

Desde hace mucho tiempo Cleyton sabia que Anastacia era mucho mas timida que su hermana mayor. De hecho de las dos, Dricela es siempre un poco mas salvaje y el mal ejemplo de las hermanas, mientras que Anastacia esta del lado delicado, en un lado intermedio, finalmente Dricela seria la flor delicada que era linda e inocente, aunque le gustaba refunfuñar. En fin, se puede dividir de bueno y malo, y seria, Druela, Anastacia, Dricela y finalmente Lady Treemane.

Por suerte el llego a tiempo, antes de que lo malo sucediera y todo terminara volviendose problematico sin remedio.

Cleyton paso un tiempo ameno con las dos hermanas, toco los suabes bollos en los pechos que comenzaban a crecer lo suficiente, y toco los traseros regordetes y suabes que gracias al ejerssicio que el mismo hizo para ambas, entonces se volvieran firmes y suabes, incluso, distintas inperfexiones en la piel desaparecieron, ya sea que ambas tuvieran un par de kiloes de mas, o que su cabello fuera un poco descuidado y demas cosas, incluso las pecas que normalmente en el futuro se considerarian como algo atractivo, desaparecio de sus mejillas y su piel se volvio blanca y tersa.

[Cleyton, ¿Esta vez te quedaras un poco mas?]

Dijo Dricela mientras se recargaba en el pecho solido de cleyton, ella parecia un gatito manso que ronroneaba y se restregaba en su pecho queriendo mantener con ella cada olor y cada sensacion.

Cleyton asintio, de hecho, casi no puede pasar tiempo con las dos hermanas, y la conversacion se mantiene mas en cartas pequeñas o vicitas temporales.

[Cleyton, ¿Dijo mi hermana que podriamos mudarnos contigo en algun momento, ¿es cierto?]