Veintiuno

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La mirada que Jihoon y Jun le habían dado a su líder, había sido suficiente para que Jeonghan explicara sus palabras —los pactos de sangre que se hacen entre miembros del mismo clan, no tienen las mismas condiciones que los que son de diferentes clanes. Lo que hicieron fue básicamente un pacto de confianza.

—Quieres explicarte mejor— pidió Jihoon.

—Los pactos de sangre que se hacen entre miembros del mismo clan, solemos llamarlos pactos de confianza ya que se espera que realmente se cumpla la palabra, porque no hay una muerte por un incumplimiento como cualquier pacto entre dos clanes, así que muchos terminan rompiéndolo. Sin embargo, de no cumplir su palabra, habrá un castigo de cualquier manera, y el castigo sólo depende de la persona, ya que cada uno tiene sus propios miedos y aflicciones; por lo que sólo ustedes sufrirán las consecuencias y no afectan al resto del clan— explicó Jeonghan —normalmente los hacemos cuando tenemos un objetivo que cumplir, pero que por cuenta propia no cumpliríamos, es más un motivador. Y al igual que un pacto entre clanes, cuando el objetivo se cumple, el pacto desaparece.

—Bueno, de cualquier forma no hay manera de que Wonwoo y yo logremos "cumplir" el objetivo— mencionó Jihoon haciendo comillas con sus dedos.

—Sí la hay— dijo Jeonghan y la expresión de Jihoon lo hizo sonreír ligeramente antes de explicar —ustedes prometieron serles fieles a ellos, ¿no?— Jihoon asintió —bueno, cuando ellos mueran, el pacto se desvanecerá y ustedes podrán tener otras parejas.

—Oh bueno, me preocupaba no poder coger con alguien más si Cheol moría— mencionó el vampiro nacido con sarcasmo.

—Bien, pues ya lo sabes— sonrió —pudieron haberse involucrado en la orgía y no habría pasado nada, sólo sus miedos más profundos se habrían hecho realidad.

—¡Oh dios, no! Al parecer yo tengo tres miedos y no quiero que ninguno se cumpla— expresó Jihoon —además— murmuró mirando hacia abajo —nosotros lo hicimos por ellos, para que confiaran en nosotros y en nuestro amor por ellos, no quiero defraudar a Seungcheol— miró a su líder.

—Y estuvo correcto que hicieran el pacto, eso les motiva a conseguir su objetivo, aunque ese sea algo permanente y a largo plazo.

Jihoon asintió pensativo, ahora que sabía que no había un castigo tan drástico si rompía el pacto, le hacía sentirlo con menos importancia y que había servido de nada hacerlo; sin embargo no iba a contarle nada a Wonwoo, si él sabía lo que acababa de enterarse, seguramente pensaría igual que él y le restarían importancia a su pacto, así que el mayor sería el impulso de Jihoon para conseguir ese objetivo que se habían propuesto al hacerlo. Antes de que alguno comentara algo más, Samuel entró a la habitación en busca del líder.

—Jeonghan, ya no hay demasiada sangre en el refrigerador— mencionó al llegar.

—Creo que tendremos que hacer otra visita al hospital— mencionó Jeonghan mirando a su pareja, quien se había mantenido callado hasta el momento.

—Sí, esta vez tendrá que ser en el este, si volvemos al mismo hospital lo desabasteceremos— comentó Joshua.

—¡Bien! Ve con alguno de los chicos y traigan más alimento, Jihoon es una buena opción para llevar.

El menor sonrió contento, comenzaba a gustarle demasiado que lo incluyeran en todos los planes, sobre todo los que incluían salir de casa. Esa misma noche todos los vampiros se pusieron de acuerdo para salir en busca del alimento, se dividieron en dos equipos, pues también necesitaban secuestrar algunas personas para que Jeonghan y Wonwoo pudiese alimentarse adecuadamente, pues seguiría sin ser suficiente la sangre embolsada. Joshua, Chan y Jihoon fueron los encargados de ir al hospital y saquear su banco de sangre para las reservas que siempre les gustaba tener, mientras que Samuel, Wonwoo y Jun vagarían por la ciudad en busca de víctimas a las cuales secuestrar.

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