Emergency de un romance

Capítulo 15

Alice y Cate comenzaron a hablar de cosas tribales en voz baja, riendo por los chistes que ambas hacían. Era extraño hablar con tanta naturalidad después de lo que habían hecho en el avión, desesperadamente consumidas por la pasión. Cate no podía dejar de mirar los carnosos y sensuales labios de la castaña, y Alice no dejaba de admirar los hermosos ojos celestes de Cate.

— Me encanta que de día tus ojos se vean celestes como el cielo — dijo Alice, jugando con la mano de Cate —, y luego de noche se ven azules. Si está nublado, me atrevería a decir que se ven grises. Se atenúan a esos tres colores. Son simplemente hermosos. — Besó las manos de la rubia —. Bueno, cuando estás enojada se vuelven de un azul oscuro.

— Gracias — respondió Cate, acercándose al oído de Alice y susurrándole —. Y, ¿cómo se ven cuando te estoy cogiendo?

— Cate — dijo Alice, golpeando su hombro

— O de rodillas — seguía susurrando la rubia.

— Basta.. Shhh... — se puso nerviosa —. También se ven hermosos, más negros, me atrevería a decir.

— Los tuyos también son hermosos. Tienen un color particular. Por ejemplo, son muy camaleónicos con las cosas amarillas, como unos hermosos girasoles — dijo Cate, besando su mejilla —. Pero lo que más me gusta es tu cabello. Es tan alocado, nunca te hace caso. Parece que últimamente lo tienes más ondulado. — Comenzó a jugar amorosamente con el cabello de Alice.

— ¿Sabes la teoría del cabello? — preguntó Alice.

— No, pero estoy interesada en saberla — dijo Cate, poniendo atención a aquella historia mientras jugaba con el cabello de la castaña.

Susurrando, Alice comentó al oído de Cate —. Es una idea divertida que sugiere que el estado emocional de una persona puede afectar la apariencia de su cabello. Se dice que cuando alguien se enamora, su cuerpo libera ciertas hormonas y neurotransmisores que pueden influir en la textura del cabello, haciéndolo más rizado o encrespado.

— Entonces ¿está enamorada, señorita Alice? — preguntó Cate.

— Sí, lo estoy, desde hace mucho, mucho tiempo — respondió Alice.

— Bueno, yo sabía de otra teoría — dijo Cate, queriendo jugar con Alice. Pero esa respuesta la puso nerviosa y decidió cambiar el tema —. Las personas con cabello ondulado tienen una personalidad enigmática y apasionada. Se dice que su belleza natural refleja su naturaleza intrincada y su capacidad para adaptarse a diferentes situaciones.

— Me describe bien esa teoría — respondió Alice, riendo junto a Cate.

Alice sabía que a veces, cuando hablaban de romance, Cate se ponía nerviosa, pero para Alice no era un problema, sabía que Cate estaba viviendo algunos sucesos difíciles y no la presionaría en nada. Sabía que la rubia la quería de alguna forma y, por el momento, eso le acomodaba.

— Hola chicas, — El despertar de Chloe rompió el momento íntimo entre Alice y Cate, llevándolos de vuelta a la realidad del avión. — tengo hambre — dijo una adormilada Chloe, despertando.

— Dijeron que ya nos traerán el almuerzo, Chloe. Hubo algunos problemas — respondió Cate.

— Mamá, ¿cómo estás? — preguntó Chloe.

— Me siento bien, creo que ahora amo viajar — dijo Cate. — Los aviones me parecen muy divertidos. — miró a Alice pícaramente.

— Qué bueno, madre. Alice es una buena compañía entonces — dijo Chloe, sonriendo.

— Muy buena — respondió Cate, devolviendo la sonrisa a su hija.

— Deberíamos ir luego al bar del avión a beber algo, ¿qué piensan? — comentó Alice.