Cap 29: Inseguridades

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Mai

Ya me encontraba volviendo a mi residencia luego de visitar a Ikkei, los rayos del sol pegaban en mi cara, estaba aliviada, senti un peso menos en mi luego de esa charla con el señor Ikkei, me habia dicho cosas muy motivadoras que fue una acaricia a mi corazon en este momento.

En unas horas seria el partido de practica, estaba pensativa sobre ir o no, sabia que si iria me distraeria un poco en el partido. Aveces sentia que me quedaba atras del equipo, veia como todos mejoraban significativamente y yo me quedaba en el mismo lugar de siempre. Tenia un nivel bueno pero ¿De que servia si no podia dar mas de mi? Yo sabia que podia dar mas pero me quedaba estancada, con recuerdos del pasado, errores del pasado que ahora me perseguian.

Llegue a mi casa, el silencio y la oscuridad al llegar era seprucal pero era algo de lo que ya estaba acostumbrada, realmente me mostraba como una chica sociable pero al llegar a casa la soledad me invadia fuertemente. Siempre trate de desviar pensamientos negativos por eso trataba de mantenerme ocupada la mayoria del tiempo.

Subi las escaleras y me encerre en mi habitacion sumida en mis pensamientos, en preguntas sin respuestas de todo tipo y hasta deseos que ansiaba cumplir. Queria llegar aun mas alto, queria ser la mejor pero no deberia quedarme atras. Las horas pasaron y con ello el partido se aproximaba, suponia que ya estaba por comenzar y largue un suspiro sonoro. Pude ver como Shimizu me llenaba de mensajes, Nishinoya me llamaba, al igual que Kageyama, pero no habia respuesta de mi parte. Todavia estaba indecisa en ir o no, sabia que no iba a poder dar lo mejor de mi, no habia dormido bien, no comia hace horas y sentia mi cuerpo pesado pero recorde las palabras de Ikkei.

-FLASHBACK-

Estabamos haciendonos pases tranquilamente, en mi corazon se desbordaba la felicidad y la calidez de poder volver a jugar con el.

-¿Tu crees que podre avanzar?- le pregunte pasandole la pelota.

-Mai, tu tienes un potencial que ni siquiera tu te puedes llegar a imaginar..- empezo a decir pensativo, siguiendo con los pases- Asi como en el voleibol y en la vida te puedes dar muchas veces la cabeza contra la pared, mas tu que eres una cabeza dura- solto una sonrisa y yo me rei suavemente- Pero tienes que recomponerte y seguir, por mas que duela, avanza, no te quedes estancada en lo que "pudiste haber hecho" o "en lo mal que hice".. Todo es un aprendizaje.- termino por decir con una sonrisa.

-No sabia que te habias vuelto tan sabio.- bromee a lo cual el solto un suspiro.

-No hay caso contigo, chispita- me respondio.

-FLASHBACK-

Me levanté de mi cama de un salto, decidida ir a jugar. No podía quedarme acostada sin hacer nada, y mi padre no estaba en casa, así que nunca se enteraría si volvía temprano. Me vestí rápidamente, me puse mis rodilleras y me dispuse a salir de mi habitación. Bajé las escaleras con rapidez y estaba a punto de abrir la puerta principal para marcharme cuando una voz familiar me detuvo.

-¿A dónde vas?

Di un pequeño salto del susto al escuchar a mi madre. Me di la vuelta y ahí estaba ella.Mi madre siempre ha sido una mujer muy alegre y sumisa. Tenía una mejor relación con ella que con mi padre, pero cuando se trataba de problemas con él, siempre se mantenía al margen.

—Voy a un partido —respondí con determinación.

—Tu padre ha dicho que no puedes ir, Mai —me dijo con un tono de aviso, acercándose a mí con delicadeza.

—Pues él no está aquí —solté con firmeza.

—Pero se enojará cuando no te vea en casa al anochecer... —respondió ella con su típico tono amable, aunque sabía que escondía otras intenciones.

Entre redes y corazones- Haikyuu!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora