Ha llegado una luna llena muy especial para Reika, ya que ha hecho que conozca a Max, Ayax y Duke.
Podéis leer su aventura, ambientada en Galicia, en capítulos cortos y muy ilustrados.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Vas a tener que darme unas cuantas explicaciones.— puede que tuviese que alzar el cuello para verle, pero no iba a dejar que me amedrentase, aunque debo admitir que era mucho más fácil sabiendo que estaba respaldada.
—Bueno, esto no son maneras.— parecía ofendido al no poder intimidarme con su mala cara y su tono desagradable a volúmenes exagerados.— Tienes que conocer a mis socios.
—¿Para qué iba a querer conocer a tus socios?— si lo hubiera sabido me hubiese ahorrado conocerle a él también sin dudarlo.
—Porque hemos venido para quedarnos.—sonrió de forma tétrica alzando demasiado el labio superior, en realidad, dudo que aquello fuese una sonrisa y no un intento de gesto amenazante.
—¿Qué quieres decir?— gruñó Ayax caminando hacia la puerta en tres zancadas. No dije nada con palabras pero en una mirada él entendió que no quería que se metiese en mis asuntos como alfa, ya que me quitaba autoridad.—Si esto es una invasión del territorio, nos incumbe a todas las manadas que vivimos aquí.
—Queremos hacerlo por las buenas, evitar bajas y llamar la atención de los humanos...—echó un par de miradas por encima de su hombro como preparándose para salir corriendo de una forma terriblemente obvia.
—Podríamos convivir si sois gente civilizada.— remarcó Max.
—No.— respondió el viejo sin un segundo para pensar.—Cuando caiga el sol mis socios y yo estaremos esperando en el bar "El cerdo borracho".—conocía el lugar de modo que no se me hizo extraño escuchar ese nombre.— Pero os adelanto que este territorio va a ser solo nuestro. Au revoir.— finalizó su discurso y se fue a marchas forzadas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
