Ha llegado una luna llena muy especial para Reika, ya que ha hecho que conozca a Max, Ayax y Duke.
Podéis leer su aventura, ambientada en Galicia, en capítulos cortos y muy ilustrados.
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Tras unos segundos de gritos desesperados y convulsiones desmensuradas, decidí retirar la flor con un soplido para que dejase de hacer contacto con su piel. Volví a meterla en el bote a sabiendas de que podía ser terriblemente peligroso dejarla ahí.
La mitad superior de su cara había quedado realmente desfigurada, tenía aspecto de herida corrosiva y sus estragos estaban a punto de llegar hasta los ojos.
—Cela ne fait que commencer.— le advertí de que aquello no había hecho más que empezar y moví el bote cerca de él, ante sus ojos llenos de lágrimas.
—Suffisant.— exclamó y trató de llevar las manos hasta su bolsillo.
—¡Alto!— exclamé poniendo el bote en una posición más horizontal y se llevó las manos a la cara. No iba a arriesgarme, de modo que yo misma metí la mano en el bolsillo por si acaso ahí dentro había un cuchillo o algo así. En su lugar encontré un trozo de papel, era un mapa de Lugo.
El plan era bastante fácil de leer, había pequeños puntos negros en los lugares donde les habíamos interceptado, pero la gran flecha roja apuntaba a Carballedo, en la comarca de Chantada.
Aquello estaba en el suroeste y era por donde menos esperábamos que pretendieran entrar, la zona que más desprotegida teníamos, donde estaba Duke.
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