— ¿Me dices que te envió directo a la friendzone? — pregunta Lily, sorprendida.
— Así es — digo de mala gana.
— ¡Bienvenido al club! — toca su vaso con el mío.
— Gracias — respondo, tomo de mi vaso con cerveza.
— ¡Hey chicos! — Grita Lily a nuestros amigos para que se acerquen — ¡Adivinen quien se ha unido a la friendzone!
— No me digas — habla Nico, mirándome sorprendido — ¿tu Mati?
Asiento.
— ¡Matías Corvalán ha sido rechazado por primera vez! — exclama Nico.
Agradezco que la música del Blue Sky, esté a todo volumen.
— Esto amerita una iniciación — dice Felipe — ¡Hey Jack! — le grita al barman que también es uno de los nuestros — tráenos una botella de whisky.
Jack actúa rápidamente, deja sobre la barra una botella y cinco vasos cortos, vierte el líquido en ellos.
— Entonces esto es por Mati — toma un vaso y todos le imitamos — ¡Bienvenido al club! — dice, acto seguido bebe su whisky rápidamente para continuar trabajando.
— ¡Por Agata! — Digo, pero mis amigos se quedan mirándome como si fuera un imbécil — ¡Por que gracias a ella soy parte del club!
— ¡Sí! — vitorean los tres al mismo tiempo. Y bebimos de nuestros respectivos vasos. Dejo que el líquido entre por mi boca para que luego me queme la garganta con su sabor amargo.
La noche transcurre entre risas y muchos tragos, hasta que la veo. Ella está en medio de la pista, bailando. Es como si la bola de espejos que está en medio de la pista, se enfocara en girar solo sobre ella para iluminar su belleza.
Me acerco a ella sin importarme lo que puede suceder después, la gente a mi alrededor desaparece y solo estamos ella y yo.
— Hola — le saludo cuando al fin estoy cerca de ella.
— Mati — dice ella sorprendida al verme.
De seguro debe de pensar que soy un sicópata, ya que últimamente me he encontrado en todos lados con ella.
— ¿Bailamos? — inquiero sin miedo.
Ella asiente, me dedica una perfecta sonrisa, de esas que me hacen perder la cabeza y querer besarle a la fuerza. Nos movimos al compás de la música, hasta que ella se aleja de mí y camina en otra dirección sin decirme nada, la sigo con la mirada para saber a donde va, pero al momento en que la veo saltar sobre un chico para besarle; siento que soy el hombre más idiota en la faz de la tierra.
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Cien días con Agata © | PA#1
Kısa HikayeMatías, aparentemente un mujeriego sin remedio y acostumbrado a tener todo lo que quiere... hasta que conoce a la chica de sus sueños. Gracias a Agata sabrá lo que es enamorarse por primera vez, pero también conocerá las desventajas que le tr...