Día 81.

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No sé si sentirme feliz por Lily porque esta saliendo con alguien o sentirme mal debido a que he perdido una parte de ella; que en el fondo desee tener para siempre.

— Cambia esa cara de culo — me llama la atención mi mejor amiga.

— No estoy a gusto — la miro enfadado.

Se apoya en la mesa para hablarme desde más cerca.

— ¿Por qué yo tengo que aceptar a tu novia y tú no puedes aceptar al mío? — susurra molesta.

— Porque Agata será mi novia por mucho tiempo, en cambio no me interesa conocer al chico de turno.

Sus ojos cambian ligeramente, la he herido con mi comentario.

— Mañana termina mi semana con Agata — se acomoda en su lugar — desde mañana me perderás el rastro para que no veas a mis chicos de turno.

— Perdón... — nos interrumpe un chico.

— Aun no queremos pedir nada, lo siento — digo.

Lily me pega una patada en la rodilla.

— Matías, él es Cesar — sonríe —. Mi cita.

Me levanto de mi lugar para saludar al idiota.

— Lo siento, Cesar — sonrío —. Es que tu forma de vestir es como la de los camareros ¿seguro que no trabajas aquí?

— No — responde a secas, claramente molesto por mi mala broma — Tú debes ser Matías.

Asiento.

— ¿Cómo pudiste ser tan idiota?

— ¿Y quien te crees para hablarme así? — me altero.

— Es que no puedo comprender el porque te enamoraste de otra sabiendo que a tu lado tenias a una chica como Lily — ellos se miran a los ojos para luego besarse.

¿Dónde deje mi arma? ¡Quiero matarlo!

Me vuelvo a sentar en mi lugar.

— Será que en Lily no encontró, lo que vio en mí— responde Agata —. Hola, mi amor — me saludo con un beso en la boca — hola chicos — saluda a los otros dos.

— Hola — responde al unísono.

— Lily es mi amiga, casi mi hermana, seria demasiado tonto si me enamoro de ella — respondo a la pregunta de Cesar.

— Muy tonto — interviene Lily —. Si hubiese pasado algo entre Matías y yo créanme que me arrepentiría toda la vida.

Mierda ¿desde cuando Lily da golpes bajos?

— Sabes Agata — acaricio el rostro de mi novia — deberíamos irnos a casa para que Lily disfrute de su cita — beso nuevamente sus labios.

— Que buena idea, amor — sonríe coquetamente —. Así nos ponemos al día con una par de cosas.

— Cesar, un gusto conocerte — estrechamos nuestras manos — Lily, suerte con encontrar a mi reemplazante — sonrío.

— Idiota — me aniquila con la mirada.

Me levanto de mi lugar para irme feliz de la vida con mi novia a casa.

Nunca había tenido una cita doble y espero no repetirla. Ver a Lily coquetear con otros es una mierda. 


Nota: No dejen de comentar, siempre les estaré leyendo <3 



Cien días con Agata © | PA#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora