Veo una sombra negra ponerse detrás de la puerta.
-____!
Esa voz la he escuchado antes.
-____, maldia sea, abre la puta puerta!
Mierda, es Justin.
-Que quieres? -Le pregunto desde el otro lado.-
-Que me abras la puerta! -Vuelve a gritarme.-
Hago una pausa y decido abrir la puerta.
Volver a ver ese rostro de ojos miel, labios rosados y ese pelo tan despeinado me pone los pelos de punta.
Esta sonriendo? Mierda! Que dientes tan perfectos y porque se muerde el labio? Oh dios estoy demasiado nerviosa.
-Me vas a dejar pasar o vas a seguir excitándote mientras me escaneas?
Me sonrojo al sentirme tan avergonzada.
-Así me gusta, que lleves ese pijama que tanto me gusta. Espero que no hayas comido aún porque tengo un hambre que me muero.
-Que buscas Justin? Porque te recuerdo que me dejaste tirada en la fuente y ni siquiera te disculpaste.
Cada uno se sienta enfrente del otro en la Isla de mi cocina.
-Me tengo que disculpar por todo? -Se quita la chaqueta de cuero que lleva y se queda con una camiseta blanca de manga corta que le queda especialmente estrecha y eso hace que se le marque más el cuerpo.
-Es lo mínimo que puedes hacer despues de dejarme como una imbécil.
-Bueno pues lo siento, contenta?
-No lo dices sinceramente.
-También quieres que me arrodille? -Se ríe.-
-Vete a la mierda.
-Uhh.. una chica dura?
Se levanta de la silla y viene hacia mi para ponerse detrás de mi espalda.
-Sé que no puedes estar ni un día sin pensar en mi. -Me susurra en el oído erizándome la piel.-
-Déjame empaz.
-Quieres que me vaya? -Gira la silla dónde estoy yo sentada y él se queda de pie delante de mi.-
-Pues sería una buena idea. -Me levanto de la silla y voy hacia la puerta.-
-Muy bien, ya te arrepentirás de decirme esto a mi.
-Adiós.
Cierro la puerta de un portazo y decido subir a mi habitación a cambiarme para ir a algun sitio a comer porque no me apetece quedarme en casa después de lo que ha pasado.
Pero porque insiste tanto en verme? Porque acaba viniendo siempre a mi casa? No entiendo a que viene tanto interés. Realmente es muy guapo, que digo guapo, es un Dios Griego como lo catalogan en mi instituto, pero aún así puede tener a todas las chicas que quiera y yo soy una más. No entiendo nada.
Me visto y decido ir a casa de Pedro para invitarle a comer por el centro comercial.
-Hola ____, estas bien?
-Sí, sí, solamente queria preguntarte si quieres venir a comer conmigo al centro comercial. Yo invito, y así nos ponemos un poco al día.
-Por mi perfecto, espera que le pregunte a mi padre si tenia pensado ir a algun sitio.
Se adentra en su casa y a los cinco minutos sale con una camiseta diferente.
-Vamos, iremos con mi coche.
Subo al coche de Pedro y nos dirijimos al centro comercial. Estamos buscando parking cuando veo esa moto que hace una hora estaba en mi portal, no puede ser. Espero no encontrármelo por aqui.
-Estas bien ____?
-Sí, es solo que me he distraido un segundo. Lo siento.
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Hold Tight
Fanfic''No vas a poder estar una noche más sin pensar en mi preciosa.'' Nunca imgainé que aquel susurro cambiaría tanto mi vida. Una historia reflejada personalmente en una chica con unas iniciativas muy claras que se enamora de un chico incapaz de saber...
