Hold Tight

Capítulo 61

Suena el despertador, abro los ojos y lo apago. Justin ni se ha dado cuenta del sonido del móvil y sigue durmiendo relajado con una respiración realmente muda.

Mis padres no llegan hasta dentro de cuatro horas, así que dejo dormir a Justin un poco más y voy hacia la ducha para no tener que meternos los dos juntos como habíamos hablado porque sinó llegarán mis padres y aún seguiremos dentro del agua. Entro en el baño de mi habitación, me desnudo y enciendo el agua caliente. Espero no despertar a Justin con el ruido del agua, realmente me encanta verle dormir y saber que está tranquilo. Veinte minutos más tarde salgo vestida del baño viendo a la persona que me hace feliz aún dormir. Puedo despertarle más tarde, así que voy a bajar a preparar el desayuno para los dos y ya después subiré a darle los buenos días.

Preparo un café con leche para los dos, como este mediodia vamos a comer bastante, mejor desayunar ligero. Saco el pollo de la nevera y lo meto dentro del horno ya que tarda bastante en hacerse. Subo los dos cafés a la habitación, los dejo encima de la mesita y me tumbo encima de Justin para despertarle. Pongo mis labios encima de su frente, voy dejando pequeños besos hasta llegar a sus labios.

Va abriendo sus preciosos ojos miel y una leve sonrisa aparece en su rostro. Coloca sus manos en mi cintura y se posiciona sentado justo delante de mi cruzando nuestras piernas y poniéndome a horcajadas de él.

-Buenos días preciosa -La voz ronca que tiene por las mañanas hace que tenga más ganas de besarle.-

-Buenos días dormilón.

-Que hora es?

-Las doce.

-Las doce?! -Se remueve por la cama.- Que tus padres vienen en dos horas y tenemos que preparar muchas cosas y.. -Interrumpo su momento de nervios.-

-Justin, ya he metido el pollo en el horno, sólo hay que preparar la mesa y te tienes que duchar. No te estreses.

-No ha sonado el despertador?

Asiento

-Y porque no me has despertado?

-Estabas tan agusto durmiendo que no quería molestarte.

-Yo quería ducharme contigo. -Hace un puchero.-

-No quiero que vayamos con el tiempo justo, duchate tú tranquilo mientras yo empiezo a preparar la mesa y no te preocupes, que tendremos muchos días para ducharnos ahora que nos iremos a vivir juntos.

-Me gusta como suena eso en tus labios.

-El qué?

-Vivir juntos.

Ahora soy yo la que saca una sonrisa en su rostro y no tardo en dejarme llevar por los labios de Justin.