Capítulo 23

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Tomaron el desayuno casi en silencio, pero en un clima distendido. Como en un acuerdo tácito, ninguno de los dos menciono de nuevo como habían pasado la noche. Se dedicaron solo a intercambiar comentarios acerca del tiempo, del perro, de que iban a almorzar, etc.

Cosas intrascendentes, cosas que no comprometían. Pero una vez que el desayuno acabo, se quedaron mirándose mutuamente, pensando exactamente lo mismo. "Y ahora qué?". Tenían todo el día por delante, y ninguno tenía idea de cómo transitarlo.

-Bueno... y ahora que hacemos?

Orlando fue el primero en abrir la boca y recibió como respuesta un encogimiento de hombros por parte de Kirsten.

-Genial...-murmuro el- Mejor pensamos que hacer, porque si empezamos a aburrirnos, comenzaremos a pelear de nuevo.

-No peleamos por aburrimiento... peleamos por cualquier cosa, admítelo.

-Sí, tienes razón... Pero si tenemos en que ocuparnos, tal vez se haga más llevadero. No crees?... No extrañas a tu hija?-dijo como si se le hubiese ocurrido una brillante idea.- Podríamos ir a verla, o salir de paseo...

-Respuesta a la primera parte: si, la extraño muchísimo. A la segunda parte: no podemos, porque no está en casa. Su madrina la llevo a pasar el fin de semana con ella.

-Ah...-respondió y Kirsten noto que parecía algo desilusionado.

"Vamos estrellita... debe haber algo que puedas idear y que no incluya a mi hija...", pensó con fastidio.

De pronto la cara de Orlando pareció iluminarse, y sonrió ampliamente.

-Lo tengo... ya sé que podemos hacer, y nos tendrá entretenidos a los dos todo el fin de semana. Aunque tal vez sea algo agotador... No sé qué tan resistente seas.

Ella frunció el ceño, pero no dijo una palabra. Casi temía preguntar,... sobre todo porque se le habían ocurrido un par de cosas pecaminosas. Fue lo primero que le vino a la mente y eso la molesto bastante. Ella no era así!...

-Recuerdas que le prometí a Jodie enviarle la película?

"Otra vez? Que no puedes dejar a mi niña en paz?"

-Sí, recuerdo...

-Bueno, se me ocurrió... después de lo que dijiste anoche. De que no soy buen actor.

-Ya me disculpe por eso...

-No, no! No quiero que te disculpes, no me entiendes! Quiero... quiero que hagamos una especie de ejercicio.

-De que?-pregunto confusa.

-Veamos películas... mis películas. Todas. Las tengo todas... Quiero que las veas, y luego, objetivamente, me digas que te parecen.

Kirsten sacudió la cabeza algo divertida ante la idea.

-Pero que te puede importar mi opinión? Ya te dije, yo no soy experta en esas cosas, ya tienes la opinión de los que saben,

-Esa opinión me importa un cuerno. Lo que verdaderamente nos importa a los actores, es que siente la persona que está frente a la pantalla. Y nunca he tenido oportunidad de preguntarle a alguien... a alguien que verdaderamente no tema decirme la verdad. Que sea sincero... Harías eso por mí?

Ella dudo un momento. Si para él era tan importante... y de todas formas no tenían otra cosa que hacer...

-Mmm... De cuantas películas estamos hablando?

Solo por hoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora