—Me alegra que llegaras, comenzaba a pensar que nos abandonaste al Sr. Gato y a mi.
—Dije que volvería, no dije cuando —guiñaste el ojo.
—¿Y el auto?.
—Lo compré, era necesario.
—¿Donde dormiste estas noches?.
Guardaste silencio mientras sacabas tus compras.
—Un hotel, necesitaba aclarar mis ideas.
Apacigüe mi apetito de respuestas por un momento y sólo disfruté de tu llegada.
Estás conmigo, es lo importante.
Ya tendré oportunidad de saber.
Ya comenzaré a entender.
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SAM II©
Historia CortaDías de ensueño. Noche estrellada. ¿Cómo apaciento tu alma angustiada?. Quiero parar el recuerdo que envenena tu felicidad y la mía. Cuán hermoso será el día en que juntemos nuestros destinos. Es tan bella la llegada. Pero aún más lo es el camino. D...
