Sentándonos a comer, nos dio por recapitular cada instante, desde que nos conocimos hasta ese momento.
Ambos, extasiados por lo que sabíamos, había sucedido el día anterior, parecíamos no terminar de digerir la realidad de que estábamos casados, ante Dios y ante los hombres.
—¿Recuerdas cuando te regalé el violín?
Asentiste mientras probabas la limonada.
—Recuerdo todo, cada detalle, es como si el recuerdo estuviese capturado en mi mente, blindado de los embates del tiempo; Todos pensaban que estaba loca al no ser como ellos, yo siempre creí que estaban locos al permitirse ser como son.
Tienes un don para comunicarte Sam.
Tan profundo y complejo es tu lenguaje ahora como lo era cuando nos hablábamos con silencios, mientras te alimentaba en el complejo psiquiátrico.
Eres arte Sam.
Eres belleza.
Eres poesía.
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SAM II©
Short StoryDías de ensueño. Noche estrellada. ¿Cómo apaciento tu alma angustiada?. Quiero parar el recuerdo que envenena tu felicidad y la mía. Cuán hermoso será el día en que juntemos nuestros destinos. Es tan bella la llegada. Pero aún más lo es el camino. D...