"Perpetuar"

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Caminaba entre colores difusos.

Miraba el cielo cargado de tus ojos, todo es tan confuso.

Miré mis manos en un patético intento por reconocer el extraño lugar donde estaba.

Hasta que te vi.

Vestida de blanco inmaculado.

Caminando sin inseguridades, en tu andar pregonabas tantas verdades.

Como que no hay nadie como tú.

Como que el rigor de mis temores se disipa al compás de tus lunares.

Al tenerte frente a mi, la insensatez de mis labios hizo notar su predominante jerarquía en mi carácter, dejándome entreabrir mi boca para hablar.

Sin dejarme pronunciar palabra, colocaste un dedo en tu boca, pidiendo no profanar el deseado silencio de tan magnífico y misterioso lugar con mis preguntas sin sentido.

Guardé la calma.

Te acercaste a mí.

Eres tan hermosa.

Pusiste una mano en mi cuello y aproximaste tus labios a mi oído, susurrando maravillas a una vasija que no escapa del promedio.

  "No respondas aún.

¿Quieres perderte conmigo?

¿Quieres deambular entre risillas y largos suspiros?

Mirar a lo incierto sin miedo a perder todo.

Dejarte cometer el crimen de profanar mi piel sin miedo al castigo.

Porque valdría la pena.

Porque luego de sentir tus besos, gustosa aceptaría la condena.

No respondas aún.

¿Quieres perderte conmigo?

¿Quieres descubrir la belleza de lo aparentemente común?

Creer como niños.

Amarnos en un delirio mortal de pasión desenfrenada.

Memorizar tus estepas de cristal.

Besar tu silueta almidonada.

¡Espera!No respondas aún.

¿Quieres perderte conmigo?

¿Quieres saborear la dulzura de lo prohibido?

Olvidar a todos.

Caminar un camino que crearemos juntos.

Descubrir lo que hay después de la meta.

Y volar cual cometas en la delicia de vivir sin temor.

Cada día decirte que eres mi ilusión más preciada.

Cada noche hacer el amor susurrando poemas a tu espalda empapada.

Ahora dime niño de mis caprichos.

¿Quieres perderte conmigo?"

Luego de pronunciar esa última interrogante y antes de pregonar mi respuesta agonizante.

Desperté para darme cuenta de que seguía en la celda.

SAM II©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora