Y ahí estaba yo, nuevamente sin poder dormir después de despertarme exaltada gracias a la misma pesadilla de todas las noches, la que nunca me abandonaba desde aquel día, esas imágenes pasan en mi mente una y otra vez, aturdiéndome y sofocándome, sin dejarme en paz, me era difícil conciliar el sueño luego de eso, me daba miedo volver a revivirlo...
Como siempre mis libros de ensayo eran mi gran ayuda para que pasaran las horas antes de levantarme, e ir a la escuela de teatro, solo ahí era feliz, y me sentía en calma, claro, jugándomela de que mis padres no se dieran cuenta de que lo combinaba con la carrera de Arquitectura que me obligan a llevar en la Universidad...
Era bastante cansado llevar ambas carreras, y si le agregas no poder dormir bien, es agotador, pero cualquier excusa era buena para salirme de mi casa, donde la presión y acoso de mis padres me asfixiaba, no soportaba ver que por más cosas que hacía para agradarlos, simplemente no funcionaban, me daba la impresión más bien que no me amaban, o si lo hacían, no lo demostraban tan bien, encajaban perfectamente con mi hermana, mi novio, y mis compañeros de la Universidad menos conmigo, y eso me enojaba y entristecía......
Ya había amanecido, uff cuanto duró, me bañé de prisa, me puse ropa cómoda porque debía ir a un barrio de clase pequeña, cosa que no me gustaba mucho, pero que era obligación para un trabajo universitario, por suerte Meli mi amiga se ofreció a acompañarme, para no perderme y hacer las cosas rápido para así llegar a tiempo a nuestras clases de teatro, ella también llevaba las dos cosas, pero al contrario de mi, ella si estaba ilusionaba con la Arquitectura, y sus padres la apoyaban en todo, la envidiaba totalmente, nos quedamos de ver en el parque, a mis padres les había dicho que la vería para un trabajo, porque ni loca les decía a donde tenía que ir a meterme, aunque claro, seguro ni importancia le tomaban...
Salí de mi habitación, mientras bajaba iba acomodando mi bolso revisando que todo lo llevara, llaves del auto, perfume, labial, maquillaje, mis libros, dinero, gas lacrimógeno, y un par de piedras, ¿qué?, voy a un barrio peligroso, no me voy a arriesgar, debo ir preparada...
-Ya me voy, -no recibí respuesta, normal -mi hermana aún dormía, y mis padres estaban muy ocupados con sus teléfonos...
-Mamá, Papá, ya me voy –les repetí con mayor fuerza, y ahí si obtuve su atención....
-Está bien hija, que te vaya bien, cuídate –me dijo mamá sin mirarme mucho, bueno, por lo menos fueron más de dos palabras, eso era ventaja...
-Recuerda que si necesitas dinero están las tarjetas -me decía mi padre, siendo como siempre lo único que le importaba....
-Que Dios la acompañe señorita Sofía, que tenga lindo día -Patricia nuestra empleada, era la única cuerda y que me demostraba su cariño siempre, increíble pero cierto...
-Muchas gracias Paty -le agradecí mandándole un beso con la mano...
Antes de salir de mi casa, me despedí de mi amoroso perrito Pinky, creo que solo él se alegraba de verme en esa casa, por lo menos lo tenía conmigo, lo amaba mucho porque fue un regalo de mi papá cuando el dinero aún no lo había cambiado tanto....
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Aunque ella disimulaba su dolor para que no me preocupara, yo sabía que estaba sufriendo, ya se le estaban acabando los medicamentos, y yo que no conseguía trabajo, porque apenas mencionaba donde vivía todos me tachaban de delincuente, lo cual me enojaba mucho porque era injusto, pero sinceramente me empezaba a preocupar, tenía tanta presión encima que estaba dispuesto a conseguir el dinero sea como sea, no me importaba nada, solo verla tranquila....
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Tu Mirada En Mí
Romance-Hola, mi nombre es Sofía Altamirano Villaroel, tengo 19 años, amo el teatro, actuar es mi pasión, soy hija (si se le puede llamar así) de padres adinerados, cuya única preocupación es mantener la clase, y el estatus económico en orden, su palabra e...
