Era tanta la angustia y tristeza de ver a mi madre debilitarse, que no pensaba en nada más que no fuera abrazar a Sofía, sus brazos me daban paz y tranquilidad, pero asumí que a lo mejor ella no se sentiría cómoda en esa situación después de todo lo que había pasado entre nosotros, así que decidí apartarme de pronto...
-Perdóname Sofía, no quise incomodarte -le dije mientras la soltaba...
-No digas eso, vos estás mal y yo quiero apoyarte -me decía mirándome con ternura...
-No estás obligada a cumplir lo que le prometiste a mi mamá -le dije afligido...
-A mí nadie me obliga a nada, lo hago por me nace no por otra cosa -me dijo ofendida...
-Ya sé, soy un tarado, perdóname, lo decía porque supongo que con el odio que me tienes debe ser difícil estar cerca de mí de esta forma -le dije apenado bajando la mirada... -pude escucharla respirar profundo...
-Yo no te odio Christian -la miré sorprendido -nunca lo hice sinceramente, no pude, te lo dije alguna vez para herirte por lo decepcionada que me sentí, tuve mucho rencor y dolor, pero odio nunca -me decía seria y a mí me sacaba de onda...
-No sabes lo que eso significa para mí Sofía, todos estos dos años me atormentaba pensar que me odiabas, y que me digas que no fue así me da paz, yo sé que te lastimé y asumí que te perdí por idiota, pero el hecho de que pensaras mal de mí por lo que dijo el imbécil de Darío, y no obtener tu perdón, era y es algo muy abrumador para mí -le dije triste... -ella me miraba......
-¿Lograste perdonarme? -le dije cautelosamente....
-Sí -dijo nerviosa -me costó mucho, lo que pasó me destrozó completamente, fue algo duro, estaba justo en un momento de mi vida en que todo se había puesto patas arriba, no creía ya en nadie, todo carecía de importancia para mi, hasta que un día después de mucho tiempo, te recordé y sonreí, ahí me di cuenta que nunca creí totalmente lo que dijo Darío, y comprendí que mi corazón había sanado poco a poco, no valía la pena sentir algo tan oscuro por alguien que a pesar de todo me había hecho muy feliz, y me había ayudado a superar mis miedos... -yo la miraba conmovido...
-¿Entonces? -le dije tartamudeando... -ella guardó silencio un momento....
-Entonces nada, decidí seguir adelante con lo que soy, sin rencores, enfocándome en mis cosas, y dejarte a vos como un recuerdo hermoso de mi vida, ahí, guardado solamente en mi corazón, pude superar lo que me dolía... -sus palabras aunque bellas me mataban...
-Y Axel te ayudó supongo –le dije sarcásticamente... -ella asintió...
-Sí, aunque parezca extraño, Axel me ayudó mucho, fue un gran soporte en esos momentos, al igual que Osiris lo fue para vos -me dijo mirándome fijamente, yo asentía...
-¿Eso quiere decir? -le dije confundido....
-Quiere decir que dos años no pasan en vano, y que cada uno ya hizo una vida muy diferente a la que teníamos, y como el tiempo no se puede echar atrás ni devolverse para impedir lo que ya pasó, no hay de otra que seguir adelante con lo que se tiene, y tratar de olvidar definitivamente.... –podía notar que sufría al decirme esto...al igual que lo hacía yo al escucharla....
-Tienes razón, yo siempre le voy a agradecer a Dios que te pusiera en mi camino, porque me enseñaste un mundo especial que me encantó conocer , pero es cierto que Osiris fue el mayor apoyo que tuve con mi mamá y mi sufrimiento, nunca me dejó, y eso no se puede pasar por alto -ella asentía con los ojos llenos de lágrimas -gracias por perdonarme, añoré escuchar eso muchas veces, solo espero que ese perdón alcance para que podamos ser amigos -me dolía lo que le decía ¿amigos? ¿estás loco Christian?........... pero bueno, por lo menos así sé que la tendré cerca.... –ella me miraba dudosa...
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Tu Mirada En Mí
Romance-Hola, mi nombre es Sofía Altamirano Villaroel, tengo 19 años, amo el teatro, actuar es mi pasión, soy hija (si se le puede llamar así) de padres adinerados, cuya única preocupación es mantener la clase, y el estatus económico en orden, su palabra e...