Estaba muy enojada, quería mandar todo al carajo, como era posible que mis padres terminaran haciendo siempre lo que les diera la gana conmigo, odio la idea de tener que andar de un lado a otro con un chofer, y justamente con ese chico que me cayó tan mal....
-Oye amiga ¿qué tienes? ¿qué te dijeron tus padres? -me decía Meli preocupada por verme tan enojada...
-Nada, solo que ahora tengo chofer -ella me miraba sorprendida...
-¿Chofer? Pero a vos no te gusta -vaya que me conoce...
-Obvio no, pero como siempre a ellos les vale mi opinión, según dicen es para protegerme por lo que me ha pasado... -ella dudaba
-Y bueno amiga, son tus padres, ellos piensan que eso es lo mejor para vos, te quieren proteger -era como un chiste para mí lo que decía...
-¿Proteger? Y me vienen a poner de chofer al chico del barrio, por favor amiga -ella me miraba con los ojos bien abiertos...
-No me jodas ¿en serio? -me miraba riéndose -que suerte tienes caramba amiga... -yo le ponía cara de pocos amigos.
-No te rías, te juro que estoy agotada de luchar contra ellos -le decía triste -y encima Christian viene con aires de que somos muy amigos o algo así -le decía irónicamente...
-Ah bueno, se llama Christian y ya lo llamamos por el nombre -me decía burlándose de mi...
-Basta Meli, que no estoy para bromas -le decía empujándola mientras ella intentaba abrazarme...
-Basta vos, si bien qué sé que ese hombre te dejó bastante impresionada -yo evitaba tocar ese tema...
-Sea como sea, ahora es mi empleado, y si no puedo hacer que me lo quiten mis padres, entonces haré que se vaya él solito -le decía riendo y ella me miraba de mala forma...
-No seas así, pobre chico... -ponía cara triste...
-Lo siento por él, pero soy como me han hecho, y ahora solo me interesa mi bienestar, y tengo que lograr que se canse y se vaya, así mis padres se darán cuenta que se equivocaron al ponerme chofer -tenía todo planeado, y no pensaba dar marcha atrás aunque a mi amiga no le hiciera mucha gracia....
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Me exige que tenga el auto en 15 minutos y se da el lujo de no ser puntual -y que esperas Christian por Dios, es la dueña -estaba sumamente nervioso, no sabía ni cómo comportarme con ella, no le importó el hecho de conocernos, desde el principio se notaba que el ser de barrio le causaba desagrado, iluso yo pensando que una mujer así podría mirar tan siquiera a una persona humilde, sabiendo que a esos riquillos solo les interesa el dinero, imposible que ella fuera diferente...
La vi venir con su amiga, que me miraba sonriendo........
-Hola, soy Melissa mucho gusto -yo le sonreí
-Mucho gusto señorita, Christian para servirle -ella me agradeció mientras Sofía me miraba desafiante...
-La puerta -me recalcaba -la abrí y le ofrecí mi mano para que se metiera al auto, pero no la quiso y me hizo el desplante -cerré mis ojos, respiré profundo y me metí....
-¿A dónde la llevo señorita? -le dije mirándola por el espejo retrovisor, ella levantó su vista y me miró con esos ojos negros profundos...
-A la universidad Christian por favor -bueno, por lo menos pidió por favor esta vez...
La señorita Melissa me había pedido poner música para no aburrirse en el camino, la complací con baladas, era un momento incómodo para ellas supongo, porque ya no podían hablar tranquilamente porque ahora yo iba con ellas, ambas miraban por la ventana, mientras yo conducía, trataba de concentrarme en hacer bien las cosas, y no meter la pata, pero no podía evitar dejar de mirarla, cada cuanto la buscaba en el reflejo del espejo, la notaba algo triste, pobre, de seguro aún le dolía la discusión con sus padres...no había dicho palabra alguna en todo el trayecto....
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Tu Mirada En Mí
Romance-Hola, mi nombre es Sofía Altamirano Villaroel, tengo 19 años, amo el teatro, actuar es mi pasión, soy hija (si se le puede llamar así) de padres adinerados, cuya única preocupación es mantener la clase, y el estatus económico en orden, su palabra e...