Olvídame

25

Carld

Maira estaba tardando en volver. Lara sentada en una esquina se sobresaltaba con cualquier ruido que oía, me empezaba a molestar.

Pasos enérgicos sonaron bastante cerca. Lara se puso de pie de un salto y se escudo tras de mí.

Jerik entro apresurado seguido de una demasiado callada Ciela.

—¿Qué pasa?

No hubo necesidad de que me respondan. Marc entro con una inconsciente Maira en sus brazos.

—¿Qué le paso? —trate de moverme, pero el lastre que llevaba del brazo me mantuvo firme en mi sitio —¿Qué paso?

Marc coloco suavemente a Maira en el sofá y miro a sus padres.

—¿Qué hacemos? —me ignoro.

—llamemos a los demás. —dijo Ciela firme.

Me estaba desesperando, Maira no parecía querer despertar pronto. Me sacudí a Lara y encare a Marc.

—¿Qué paso?

—la encontré cerca de la frontera sur.

—eso está muy lejos de aquí.

Él asintió de acuerdo y siguió:

—él estaba del otro lado y ella solo cayo —por la forma en que me miro supe que no diría nada mas, al menos no frente a sus padres —la traje aquí y de camino los encontré a ellos.

—¿ya les avisaste a los demás? Sobre la amenaza en ese lado de la frontera.

—sí, ya lo hice y espero no tarden demasiado.

Ciela se acerco a la ventana y entono un hechizo. Poco después un ave apareció en la ventana, Ciela le susurro el mensaje y la envió hacia la noche.

Ellos estarían aquí pronto. Necesitaba hablar con mi hermano antes que nadie mas.

—Carld —me gire para ver a Marc mirarme furioso, no tenía tiempo para él. —Carld. —había un deje de ansiedad en su vos.

—ahora no —gruñí en respuesta.

Salí de la casa, me parecía demasiado pequeña con todos ellos aquí. Necesitaba enviarle un mensaje a mi hermano

—¡Carld!

¿Por qué me siguió?

—te dije que ahora no.

—no, ahora sí. —me jalo por el brazo deteniéndome. —¿Por qué la trajiste aquí?

—¿Dónde querías que la llevara? ¿Con el aquelarre?

—deberías haber terminado el trabajo.

Me enfurecí.

—¿Terminado el trabajo? —me acerque amenazante a él —te refieres al trabajo que tu no pudiste hacer.

—es mi hermana, no pude quedarme a ver como había terminado después del choque.

Reí de forma cruel.

—lo que pasa es que no puedes aceptar tu culpa. —lo pinche con el dedo —la única cosa que debías hacer era deshacerte de ella. Era bastante fácil.

—quiero ver qué haces si el problema fuera Enry.

—no dudaría un segundo en sacarlo de su miseria, —dije con total sangre fría —pero mi hermano sabe que no se traiciona al aquelarre. Que nuestra fuerza esta en nuestra unidad.

Marc iba a decir algo mas pero un ruidito nos alerto.

Lara nos miraba fijamente.

—te buscan. —fue todo lo que dijo.