Olvídame

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Greg:

—Elaine no era una devoradora de almas. —dijo Iris a mi lado con tono aburrido.

Una devoradora de almas, como Iris, es una bruja que mantiene su poder y su juventud matando personas en medio de un ritual donde le cortaba el cuello con un cuchillo marcado de runas, la sangre la recolectaba en un cuenco donde sumergía las manos y las pasaba por su cuerpo bañándose con ella. Con el mismo cuchillo abrirá el pecho de la víctima y arrancaba el corazón que devoraba sin vacilar.

Iris usaba el poder que obtenía en sus rituales para mantener a Alfredo a su lado.

—Te equivocas amor, ella ahora es una devoradora de almas. —aseguro Alfredo.

Charli se tenso y apretó más el grimorio entre sus brazos.

—¿Qué paso con ella? —le pregunté. —¿Qué paso con Elaine?

Charli trago y miró a todos lados. Iris la tomó de brazo antes de que haga alguna cosa.

—¿Qué pago con Elaine? —le repetí de forma amenazante.

—Cuando fui a ver a Elaine, ella estaba muriendo pero no pude ayudarla.

—¿Por qué no pudiste si tenías el libro? —le recordé.

—Porque ella estaba muy alterada, repetía una y otra vez que estaba atrapada.

—Porque estaba atrapada. —se burló Iris

—No me refiero a eso. —Charli se zafó del agarre de Iris y se me acercó amenazante —alguien había llegado antes que yo. Recuerdo que vi restos de un ritual, alguien se llevó su alma y la del agonizar de la peor manera.

Mire a Iris pero ella estaba mirando fijamente el grimorio.

—¿De dónde lo sacaste? —ella trato de alcanzarlo, pero Charli lo alejó de ella. —sé cual libro es ese, es el grimorio del aquelarre de Yara.

Las mujeres se retaron con la mirada, podía ver el momento en el que Iris reconoció a Charli. A diferencia de Iris, Charli no tenía el poder suficiente para mantener su apariencia así que estaba bastante cambiada. Los años no habían sido buenos con ella.

—¿Cómo lo obtuviste? —Alfredo tomó la mano de Iris y la apretó llamando su atención. —Greg, ¿Cómo es que ella tiene ese grimorio?

—Yo se lo di.