13. El armario

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Draco me ha pedido salir a dar una vuelta, el sábado después del partido Hufflepuff-Ravenclaw. Dice que debe contarme algo importante, pero he decidido no preocuparme hasta que Ravenclaw pisotee a Hufflepuff.

-¡Va a ganar Ravenclaw, y lo sabes!- proclamo, en la grada.

-Ya lo sé, ya lo sé- responde Draco, algo desinteresado y con la mirada perdida. Tiene cara de estar pensando en sus cosas, pero en cosas serias, no en nuestras típicas tonterías. Y debe ser algo realmente grave, porque él nunca está así en un partido de quidditch.

Media hora más tarde, Cho Chang se alza con la snitch, dando la victoria a Ravenclaw.

-¡Ibais a ganar, estaba escrito!- grito cuando veo a Cho, y le palmeo la espalda-. ¡Team Ravenclaw forever!

-Verás como no dices eso cuando te patee el culo en el próximo partido- sonríe ella, y niego con la cabeza cuando una mano tira de mí.

-Ailey, tenemos que hablar.

Narra Draco Malfoy

No se dónde llevar a Ailey para poder hablarle sin que nadie nos moleste, y de repente se me ocurre un sitio: en la muralla, junto al sauce boxeador, ese punto que me conozco tan bien, fuera del alcance de los golpes, pero donde nadie se atreve a ir por miedo al árbol.

Tiro de su muñeca, cada vez más rápido, para llegar al punto exacto.

-Eh, Draco...

-¿Sí?- intento sonar dulce, pero me da a mí que no lo consigo.

-¿Por qué vamos al sauce boxeador?

-Tranquila, conozco un sitio donde no nos golpeará.

Ailey no parece muy convencida, pero me sigue de todos modos. Nos refugiamos en el recoveco de la roca donde vengo cuando quiero estar solo, a pocos metros del sauce.

-Tenemos que hablar- repito, y parece que Ailey se asusta.

-No me metas miedo, ¿eh?

No le sale el tono despreocupado que pretende, lo que significa que de verdad le importa lo que vaya a decirle. Si supiera...

-Antes que nada- comienzo, respirando hondo-, prométeme que no vas a contárselo a nadie, absolutamente a nadie.

-¿Ni a Leah?

Me asusta pensar la posibilidad de que se lo cuente a Leah. ¿Qué diría? Y lo peor, ¿qué haría? Conociéndola...

-Ni a Leah- farfullo-. Prométeme también que... que no me mirarás raro, que no te reirás de mí, prométemelo.

Narra Ailey Abbado

Draco parece realmente preocupado. ¿Y si es algo realmente importante, demasiado grave para solucionarlo con magia? Si le pasara algo... No me lo perdonaría.

Narra Draco Malfoy

-Te lo prometo- dice ella, mirándome seria.

-Pues... verás, al principio no estaba seguro de que fuera cierto... De hecho, ahora tampoco lo estoy y... Mi sexto sentido me dice que me fíe de ti, creo que eres la única a la que puedo decirle esto sin sentirme mal, sin decirme a mí mismo que no debería haberlo contado.

-¿Y tus amigos, Crabbe y Goyle?- pregunta ella con total inocencia. Es... demasiado inocente, por eso confío en ella. Demasiado mona como para querer fastidiarla, y se ve demasiado pequeña para no querer protegerla. Por eso, por eso me fío, pero me da miedo que vaya a reírse, que se burle, que no me acepte de nuevo ni nada. Pero... Podría hacerlo, después de lo que le hice con los hipogrifos. Bueno, al menos le estoy dando la oportunidad de devolverme el golpe, ¿no?

Hija De Nymphadora TonksDonde viven las historias. Descúbrelo ahora