23. Veelas

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Narra Ailey Abbado

Montamos de nuevo en la escoba de Fred, pero ahora no soy capaz de convencerlo para conducir la escoba. Conforme nos acercamos al bosque, siento que estoy acertando con lo que hago, y el murmullo que suena de fondo en mi cabeza se amplifica cada vez más. Son veelas, estoy segura...

-Baja ahí- ordeno, señalando un claro en el bosque. Inmediatamente la escoba baja hacia el pequeño claro, perfecta y sospechosamente circular.

Narra Fred Weasley

-Están cerca...- murmura Ailey, frotándose el entrecejo. A decir verdad, yo también noto algo, como si mi cabeza quisiera girarse hacia...-. Ahí.

Ailey señala un punto muy concreto entre la espesura de los árboles, un sitio que intenta con todas sus fuerzas que vaya a él, que me llama...

De repente tres figuras femeninas, sublimes, se dejan ver, y al instante las reconozco como veelas, pero por algún milagro no me parecen ni de lejos tan despampanantes como Ailey, se ven demasiado... Demasiado perfectas para ser reales.

Narra Ailey Abbado

-¿Qué le pasa al humano?- dice una de las veelas, mirando a Fred sin dejar de bailar.

-No babea- contesta otra de ellas.

-¿No ha caído?

Las dos veelas siguen hablando sobre por qué Fred puede no haberlas mirado, mientras la tercera aguarda pacientemente, pero siguen sin darse cuenta de que estoy aquí. Y la verdad... A mí también me extraña que no se haya fijado en ellas, pues ya sabía los efectos que suelen ejercer en los hombres y...

-Mestiza, ¿quién es ese chico?

-¿Hablas conmigo?- pregunto, tontamente. ¡Pues claro que habla conmigo, tengo sangre veela y humana! Soy la mestiza, pues claro.

-Sí. ¿Quién es este chico?- repite la veela.

-Esto, Ailey... ¿Qué estás diciendo? No entiendo un carajo- dice Fred, rascándose la nuca.

-¿Qué? Pero si... Si estoy hablando igual que siempre, no...

-No puede entendernos, ni entenderte a ti mientras hables con nosotras- me corta la segunda veela-. Estás hablando Veelio, y él solo oye unos cantos.

-Fred, ¿qué oyes de ellas?- le pregunto, agitando la mano hacia las veelas.

-Como si cantaran, pero es como si cantaran runas-parsel o algo muy raro.

No lo entiendo. ¿Y porqué yo sí y él no?

-Te lo dije- sisea la segunda veela-. No nos entiende, es Veelio.

-Permíteme presentarme- dice la primera veela-, me llamo Godoetta, reina de las veelas de Albania.

-Espera... ¿Estamos en Albania?

-En Albania Norte, sí. Yo soy Lennedka- farfulla la segunda veela.

-¿Y ella?- le sonrío a la veela que parece más pequeña, pero solo por estatura, pues su cara es la de una apuesta rubia de veinte años.

-Ella es la pequeña Iera- canta Godoetta-, y aún tiene setenta años, es muy joven para conocer los encantos de las veelas.

De modo que... ¿Esa chica tiene setenta años?

-Pero ¿sois inmortales?

-Casi- explica Lennedka-, simplemente vivimos mucho tiempo más que los humanos.

Hija De Nymphadora TonksDonde viven las historias. Descúbrelo ahora