Hija De Nymphadora Tonks

27.

-Así que... ¿Todo lo que yo sienta, lo sientes tú?- pregunto en voz baja, para no despertar a los pájaros.

-No exactamente- contesta Draco-, sólo noto tus emociones más fuertes.

-Entonces si, por ejemplo, Fred muriera...

-... Yo solo notaría tristeza- completa Draco, sonriendo.

-¿Y cómo haces para hablar dentro de mi cabeza?- pregunto, palmeándome la frente.

-No creo que el mismo Capricornio sea capaz de explicarte eso- Draco se encoje de hombros-. ¿Volvemos? Estoy muerto de frío.

Y lo cierto es que yo también: es muy temprano, está amaneciendo, y ambos estamos en pijama. Y recuerdo: mi pijama es una camiseta raída y un pantalón corto tipo bóxer. Por suerte, cogí mi capa antes de salir, y allí me encontré con Draco. Maldita telepatía...

-Entonces si ahora me pego un golpe en la cabeza...

-Me dolería la cabeza a mí también- termina Draco.

-¿Y puedes completar mis frases?

-Creo que sí, no lo he probado.

-Vamos a intentarlo.

Draco cierra los ojos muy fuerte.

-¿Qué haces?

-Concentrarme.

La imagen me resulta tan mona y patética que me río.

-A ver, concéntrate. ¿Que dices si yo te digo que el personaje de libros más sexy del mundo...?

-¿Pita Meliar?- pregunta, y su forma de decir Peeta Mellark es tan absurda que casi me río.

Casi, porque me ofendo frente a esos incultos que no conocen a mis ídolos literarios.

-Te has ofendido. ¿Por qué?

-¡Oh, deja de leerme la mente, me da escalofríos!

-Vale- Draco alza las manos en un gesto de rendición-. Entonces, ¿por qué te has ofendido?

-Háblale a mi mano- miro hacia otra parte mientras le muestro la mano, pero no puedo contener una sonrisita.

-Hola, mano de Ailey. ¿Por qué se ha ofendido ella?

-¡Pita meliar!- grito, casi riendo, y encaro a Draco.

-¿No se dice así?

El resto del trayecto hacia el castillo me lo paso enseñándole a decir «Peeta Mellark», y explicándole con pelos y señales el principio del primer libro de Los Juegos del Hambre.

-¿Y entonces, tanta ceremonia y al final van a matar a veintitrés de ellos?

-Veintidós- corrijo, parándome junto a la puerta de Hogwarts-. Peeta y Katniss sobreviven los dos, sino no habría segundo libro.

-¿Segundo libro? ¿Que hay más?

-Hay juegos todos los años, idiota- sonrío, apoyándome en el marco de la puerta.

-Entonces... ¿Me obligarás a leerlo?

-O pensaré todo el dia en Peetniss para que tú también pienses en ellos- me río-, así que será mejor que te los leas.

-¿Hay películas?

-Tonto.

-¿Tonto?- Draco alza la ceja.

Sonrío.

-Es ley de vida leer el libro antes que la película, siempre son mejores.

-Pues mi ley de vida es joder a Harry.