Cap.- 18 Ayato

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Regrese tan rápido como pude con Yui y tratando de despertarla era inútil, ella no estaba teniendo ninguna reacción, carajo busque las llaves de la puerta y abriéndola tomé la cabeza de mi hermana para sostenerla al girar la perilla y abrir la puerta, la tomé por debajo de los brazos y sujetando la fuerte al ponerme de pie sus piernas fueron a mi cintura cuando reaccionó un poco.

-Que carajo pasa contigo.-una de mis manos fue a su espalda y otra por debajo de sus muslos para sostenerla fuerte, cerré la puerta con un pie y aliviado de que Yui volviera a caer inconsciente todo el maldito piso estaba retumbando con los gritos de la mujer que Laito seguro se estaba follando.-Cabron jodido.-Yui estaba empapada, y fría su piel prácticamente paresia hielo contra la mía, su cabellos se pegaba a su rostro y era un echo que por el estar borracha, todo ella era un desastre.-¿Shu es un echo que te va a matar?.

La lleve a mi habitación y acostando la en mi cama cerré la puerta para solo después buscar algo de ropa para que se cambiara, yo estaba completamente mojado solo por cargarla y no podía dejarla dormir así a menos que quisiera que se enfermara.

-Yui, Yui, maldita sea despierta.-la sacudí un poco fuerte para que despertara y se cambiara de ropa pero solo murmurando entre sueños ni siquiera paresia despertaría.-Yui...mierda estas completamente mojada y si no te quitas esa ropa te vas a enfermar.

-hmh, déjame.-me dió un manotazo ni siquiera fuerte cuando la volví a sacudir de hombro y girando se para no mirarme era un echo que estaba temblando.

-Yui, tienes que cambiarte de ropa y secar tu cabello.-pero pronto me dí cuanta que no lo haría y resignado fuí al final de la cama para desabrocharle los zapatos altos, ni siquiera podía creerme habia llegado hasta aqui usando esas cosas sin caerse.-te daré una de mis camisas para que la uses, vamos despierta y ve a cambiarte..-pero antes fui al baño para traer una toalla y secarle el cabello.-Yui.

-¿Ayato?.-al fin abrió los ojos al terminar con su cabello y levantando su mano sus dedos fríos pasaron por mi frente, ojos y bajo hasta mi boca entonces sonrió y dejo caer su brazo a la cama.

-Despierta y ve a cambiarte.-me levanté del colchón para ir por la ropa que le daría y solo escuchando como se movía era un echo que al fin me habia echo caso y estaba reaccionando.

-Tengo frio.

-Claro que tienes frío, tu ropa está completa mente moja, ya te seque un poco el cabello pero sácalo un poco más antes de volver a la cama.-era un echo que solo podría darle una de mis camisas que le quedarían demasiado grandes y buscando también unos bóxer por lo menos podría utilizar los como una de sus diminutas pijamas.-Toma, esto te quedará bien.-ni siquiera pude quitar mi mirada de sus acciones porque mirandola ya sin blusa y en una muy transparente lencería, el brasier negro no dejaba mucho a mi imaginación y mientras que Yui seguia quitando se los shorts ajustados pronto las diminutas bragas fue solo lo que le quedó.-¿Que mierda haces?.

-Estoy mojada...y tengo frio.-practicamente eso me lo dijo de nuevo con los ojos ya cerrados y tumbando se en la cama una vez más yo por mi parte solo seguía inmóvil aún mirándola.-Ayato.

-Ayato

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Enfermizo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora