Cap.-44

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"Narración normal"


Y aquí estaban sentados en la sala de la mansión Sakamaki cual si condenados fueran y estuvieran preparándolos para ir al paredón, y es qué diablos ahora mismo todos estaban en la misma situación y con problemas nadie se salvaría no importándole a Karl Heinz que algunos de sus hijos estuvieron mas ebrios que otros, y aunque si estaban casi callándose de lo borrachos que estaban, o en el caso de Ayato por la anestesia que le habían aplicado no por esa situación les diferenciaba la mirada reprobatoria y llena de enojo que dé pie les brindaba mientras que caminaba de un lado para otro.

-Me tienen arto, cansado, fastidiado, sofocado de tantas tonterías en las cuales se meten, y tu Yui, tu mi delicada niña.-se detuvo frente a la rubia que aunque lo miraba, borracha prácticamente no sabía si lo que hacía realmente era mirar a su padre, porque doble este la miraba desde dos direcciones para ella.-Ni siquiera tienes escusa por lo que paso, mírate Yui, mírate en las condiciones que estas.

-Pa.

-Pa nada Yui.-y si lo mejor era descender la mirada porque su padre aunque doble estaba furioso y con el ceño fruncido siguió su camino para llegar al frente de Laito.-Y tu Laito, digo a estas alturas que me puedo esperar de ti, que me entere que te fuiste a las vegas para casarte, que una chica se aparezca en la puerta para decirme que lleva un hijo tuyo, o no se, qué te gastaste todo mi dinero en alguna fiesta improvisada podrían ser cosas hechas por ti, pero esto.

-Yo no soy tan idiota, digo se nota que no me conoces porque yo siempre traigo con migo preservativos.-y kami que los cuatros chicos ahí casi quisieron golpearlo cuando sacando de su cartera extendió una tira de preservativos, y Yui, bueno ella solo sonreía por lo idiota que podría llegar a ser Laito.

-Te parece gracioso esto Laito.-y joder que no, pero mierda que ya había hablado y a estas alturas quedarse callado era peor que seguir hablado por hablar.

-Bueno tu eres quien piensas lo peor de mi padre.

-Tan solo.-exhalo Karl porque Laito era todo un caso, y bueno como culparlo a el cuándo el mismo en su juventud le había dado los mismos dolores de cabeza a su padre, y vamos que ahora comprendía el por qué todas esas migrañas para su padre.-Como sea, Ayato.

-A mi ni siquiera tendrías que culparme viejo, yo soy el héroe aquí.

-¿Héroe?.

-Yo la rescate cuando aquel maldito la golpeo.

-Golpeando al chico que golpeo a tu hermana, Ayato mira te entiendo porque en tu logar yo habría echo los mismo, defendiste a tu hermana y.

-Y que ahí de mi, cuando mire como golpeaban a Ayato y Yui estaba debajo de esa chica no dude en ayudarlos, mis malditos zapatos están sucios y llenos de sangre.

-Hay Kanato, y tu, tu mi niño que jamás se mete en problemas.

-A no, y que ahí del día que le pateo el trasero a Ruki.

-Ayato.

-Solo te digo que Kanato no es un niñito inocente, y joder tiene la misma edad que nosotros, además de que tú mismo te sabes las porquerías que hace con todas esas chicas en nuestro departamento.

-AYATO.

-Y entonces que, te gustaría estar en mi lugar jodido pie pequeño.-y si para nada Kanato eso lo había susurrado porque fuerte y claro Karl solo podía sobarse la cien por lo que ahora mismo estaba pasando con sus hijos.

-Como me llamaste loco de mierda.-y si Ayato se levantó al instante.

-Kanato.-y entonces Karl lo llamo a él porque Ayato de pie no dudaba se le echaría encima de un momento a otro a su hermano, y es que sonriéndole el peli lila solo esperaba el momento en que Ayato le llegaría de frente para comenzar una nueva pelea.-Ya acaben con esto y tu.-Karl jalo a Ayato por el cuello de su camisa desde la parte de atrás, y es que ni siquiera necesitaba utilizar fuerza por la debilidad que tenía Ayato y sentándolo lejos de Kanato y en otro sofá, solo escucho el auch que Ayato exclamo por aun su dolor en la costilla lastimada.-Y tu Kanato por tu bien es mejor que sierres la boca.

Enfermizo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora