Cap.-45

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Al entrar al salón rápidamente tome asiento a un lado de Subaru y es que ya mis hermanos estaban en sus lugares en la mesa y estar con mi hermano Subaru y a su lado era mucho mejor que tener a mi lado a personas con las que no quería estar y que mirándome solo quería que dejaran de hacerlo, en especial mente una que rubí se fijó en mi cuando tomo asiento.

-¡Llegan tarde!.-y lo sabía, realmente lo sabía y lo tenía en claro porque las luces apagadas y mirando a mi padre al frente del escenario improvisado junto a la señora Beatrix la familia de Ayame y mi madre me lo dejaban muy claro, pero que podía hacer para darles una explicación y solo no diciendo nada deje de prestarle atención a Ayato para fijar mi mirada en mis padres que nos miraban sonriendo.

-Hubo un problema con el auto, nada de qué preocuparse pero fue lo que nos retrasó.-y por lo menos Reiji dio una explicación coherente, y no contándoles que salí del auto corriendo suponía que era lo que menos quería contarles a nuestros hermanos esta noche.

-¿Algo con el auto?, en verdad tu auto el que jamás te ha dejado tirado, vamos Reiji como si eso fuera posible y más aún cuando la fiesta de nuestro hermano mayor es lo primordial en este día.

-Como si una primera vez no pudiera existir Laito.

-Mhm, supongo que tienes razón, siempre hay una primera vez.

-Señoras y señores, familia.-y deje de prestarles atención a todos en la mesa porque joder no quería recordar lo que había pasado antes y queriéndolo olvidar solo me lo repetí una y otra vez hasta creérmelo, pero como, como hacerlo cuando aún estaba nerviosa y mis manos estrujado la falda de mi vestido lo estaban arrugando mucho.- Me alegra su asistencia esta noche, porque esta noche es muy especial para toda mi familia.

-Si claro, como si eso fuera posible.-y escuche a Ayato decir aquello tras de mi con burla pero no girándome solo después escuche también la risa bajita de Laito.-Digo al menos debería de cambiar esa expresión de limón agrio que se carga, o miren tía Beatrix ya se percató.-y si lo había hecho porque dándole un apretón en el brazo Shu solo después sonrió un poco o al menos suponía que lo había intentado porque solo logrando una mueca de lado eso era lo suficiente para ya no tener una cara tan amargada a lado de Ayame que al contrario si sonreía mucho.

-Por lo menos su expresión ya cambio, pero bueno como culparlo de estar tan amargado si el pobre diablo se está a punto de casar con Ayame.-y solo después de que soltara eso Subaru, vamos que Laito se riera no ayudaba en nada para que no nos pusieran atención mientras que dándole una patada Subaru por debajo de la mesa supe que había sido el por qué solo después Laito le reprocho el dolor.

-Les juro que si no sierran la boca ahora mismo acumulare sus horas de trabajo hasta que llegue un nuevo siglo.-y eso basto para que todos hicieran silencio por un micro segundo, o al menos hasta que Ayato y Laito volvieron a soltar risas bajitas y todos en la mesa los miramos, y si lo digo porque yo también los mire sin creerme lo que pasaba porque aun nuestro padre hablaba al frente de nosotros, y si también nos daba miradas de reproche.

-Vamos Reiji esto lo bale, lo bale mucho.

-Ayato por favor.-y por lo menos intente yo también tranquilizarlos poro no lográndolo exhale cuando no se callaron.

-Por favor Yui acéptalo tu también la odias.-y era verdad pero no por eso criticaría a la pareja de mi hermano, y menos aún en la fiesta de su compromiso cuando cualquiera me podría escuchar y hacer un chisme que terminaría en los periódicos.-Kanato la odia, Subaru, Laito, Reiji y yo, todo mundo la odia.

-Bueno ok, pero no por eso arruinaremos la fiesta de nuestro hermano.

-Esta fiesta esta arruinada para él, joder solo mira su rostro.-y si Ayato tenía razón Shu tenía la peor expresión que podría tener un novio, pero no por eso nosotros arruinaríamos esto más para él.

Enfermizo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora