Lord Zacaria estaba con humor de perros, No le gustaba para nada la forma en que lo miraba su estúpido mayordomo.
—Ese estúpido cree que no lo notó esta como un lobo herido por que Madie se fue. Esa pequeña zorrita solo ha sido mía y cuando tenga la custodia de Natán me va a venir a suplicar, para que la mantenga bajo mi techo y entonces la tendré debajo de mi gozando, y ya no como mi esposa sino como mi amante hasta que me harte. Este estúpido cree que en esta casa es indispensable, pensaba matarle como un perro, pero debo portarme bien si quiero la gracia del Rey. Junto con su despido le daré un escarmiento para que me recuerde. No me gusta para nada tener que soportar su presencia o terminaré matándolo, cada que me mira como perro altanero me dan ganas de llenarle la panza de agujeros.
******
(Moth)
Maldito Zacaría como lo aborrezco, me mira con ese aire de superioridad solo por que es muy rico y tiene un titulo, me esta ahogando el dolor de estar lejos de ella y apenas a pasado una semana me ha prohibido tomar mi descanso, pero así es mejor he hecho correr el rumor de irme a Irlanda, así cuando me lleve a Madie no buscara el lugar correcto. Me la llevaré, la protegeré y si la suerte me acompaña, la haré mi mujer, me la llevaré como siempre anhele será mi esposa. Tiene que quererme, cerré mis ojos a cavilar lo que me trajo a Inglaterra, los católicos eran perseguidos por sus ideales y leyes anti-católicos fuertemente enfrentados a protestantes la situación era precaria a pesar de la incorporación de Irlanda al Reino unido, en esa etapa sangrienta fui perdiendo a mi familia, mi madre tenía hermanos y hermanas al igual que padre, todos ellos con hijos todos fueron pereciendo de un lado o del otro, poco a poco solo los hijos más jóvenes se salvaron. Tenía 25 años cuando salí de Úlster, de las tierras que cada familiar iba dejando algunas se vendían, otras poco a poco mal administrando. Llegue a Black pool. Alguna de mis primas se casaron. Termine mis estudios de administración en Bradford, pase por Leeds, sheefield, Derby, Coventry, después logre vender las tierras que mis padres y tíos dejaron así pasaron 7 años, fui de aquí para allá, me guarde todo lo que quedo de las tierras hasta que compre unas tierras al llegar a Luton en Slip End. mantuve correspondencia con ella hasta que fallecieron, la última hace 5 años. Me quede solo, busque el amor de alguna mujer y en mi precaria situación como administrador en algunas haciendas encontré que yo era relativamente muy poco cosa como un pobre extranjero en comparación de un Ingles la mujer que me gustaba se caso con un viejo comerciante de situación medianamente solvente bien relacionado con un duque, me pase mucho tiempo por diversos lugares, trabajando y ahorrando, cambiando de trabajo hasta que llegue a Wembley me ofrecieron unas tierras en Perivale, fui hasta este lugar, vendí las tierras en Slip End y con mis ahorros compre la casa y tierras de mis sueños en Perivale. Me quede sin fondos así que me dirigí a Brendford, donde la conocí, me ofrecían el puesto de mayordomo muy bien pagado donde siempre se exigía discreción, claro que no imaginaba hasta que punto era necesaria la discreción en esa casa, tomé el empleo. Ella estaba sentada en un rincón de la casa con Ivett, con su aire inocente, yo que sabía tanto de mujeres, sentí en su aura algo diferente, desde el primer instante supe que era única. Hasta que supe una semana después por que siempre estaban en los rincones, el anterior mayordomo había perdido su empleo después de una golpiza al decir que denunciaría los hechos (los desconocía) bajo esta serie de visitas de un abogado. Siempre se escuchaba el cuchicheo de la cocina; se iban con la ayuda de Miranda Baycon abuela de Ivett, se irían juntas. Entonces lo supe; cierta decepción se instalo en mi corazón cuando un par de mañanas note los inconvenientes vómitos de la solterona que atendía a la niña, me miro avergonzada al entender que saque mis conclusiones, la sentí tan triste que procure que no percibiera una cambio de actitud, en mis acciones o mi voz.
La tranquilidad de saber que ellas estarían lejos de ese desgraciado me hizo retener mis impulsos de matarlo. Ahora yo les cuidaría los pasos, en lo que mis tierras producían, y me hacia de unos ahorros. Bajo la condición de no denunciar el intento de asesinato al anterior mayordomo, se mantuvo oculto el motivo del cambio de domicilio de la pequeña, encontré agrado en la casa y mis sentimientos por Madie no decrecieron, la quise tanto o más que el primer día. Soportar al imbécil de Zacaría era un veneno, poco a poco fui conociéndolo, y con el tiempo supe la verdad sobre lo que ocurrió con Madie. Disfrute cada momento de su maternidad, cada semana que la veía se iluminaba mi vida, era muy quería en la casa Nefilt, así que siempre llevaba y traía información cuando su pancita se fue notando, me permitía un contacto, como deseaba que ese bebe fuera mío, siempre las sorprendía cuando mi conversación también incluía a la pancita de Madie, muy a pesar de la razón fue una dulce espera ellas estaban felices, Madie estaba tranquila incluso sonreía, muy poco para mi pero sonreía, cuando murió Miranda Baycon, regresaron, y con ellas el pequeño que me conocía tan bien, pero estaban en riesgo, mis tierras trabajaban prósperas, pero Madie no se iría conmigo y yo no podía sacar a Ivett de ahí.
Ahora las cosas estaban cambiando rápidamente, lleva ya varios años esperando aguardando por ella, estar con mujeres era tan diferente nada me llenaba, pero cunado la tenía enfrente, cuando podía tener un contacto con ella, lo sabia solo la quería a ella, deje de buscar en vano que alguien llenara lo que solo podría lograr ella. Tenía dos años sin estar con una mujer, cuando entre en su habitación con la promesa de tocar su espalda, una prueba para mi corazón de que no dominará mi cuerpo y mi deseo por ella y mucho más esta por venir, pero estoy seguro que sucederá... sucederá...
***
- El muy imbécil esta retándome por que no le di el descanso, -la sonrisa de Zacaria era de satisfacción.
-—Ahora lo echaré como un perro.
Se encontró con uno de los mozos de cuadra y lo reprendió, con el fuete le dejo la cara marcada cuando Moth se acerco se encontró con que otros dos tipos estaban ahí para el cometido de dejarlo muy mal herido. Se defendió y Zacaria se enfrento con él con látigo en mano solo que no obtuvo el éxito requerido, apenas y logro darle unos azotes cuando Moth se las arreglo.
— Largo de aquí -le dijo y le dio su sobre de pago-No quiero volver a saber de ti, ya no me sirves. Moth lo tomó por el cuello y lo azoto sobre una de las paredes de madera del establo, Zacaría llevaba una manopla y ambos terminaron tirados. Moth se levanto y huyó.
A la tarde siguiente Zacaría se entero que como Moth no se sentía a gusto en la casa Nefilt algunos tenían entendido que deseaba regresar a Úlster. Entonces Zacaría se dio por satisfecho.
- Sabía que después de enfrentarme huiría como un vil perro.
Zacaría estaba lastimado por la fuerte pelea con Moth. Claro que el ya tenía un plan bien hecho, Madie estaba sola, Natán sería su heredero y pronto aprendería a despreciar a Madie, tanto como él. Sería su orgullo. Ya lo era, su pequeño bribón.
ESTÁS LEYENDO
Sin derecho a elegir
Historical FictionIvett es hija del Vizconde Zacaria Nefilt un verdadero tirano, simplemente debe presentarse y decir si acepto, su única opción "aceptar", pero el solo hecho de querer entender la razón por la que su padre decide casarla, la hace acreedora de una te...