Todos miraban expectantes a la pelinegra, que hace unos momentos le habian puesto el sombrero Seleccionador.
Desde hace unos cinco minutos (o más) la mayoría prestaba atencion para saber a que casa pertenecería.
Los Merodeadores (en especial cierto oji-gris) deseaban que quedara en Gryffindor. Para asi poder incluirla en varias bromas y ser sus amigos.
Pero cierto merodeador pensaba que la pelinegra podía quedar en otra casa, que no era exactamente una de sus favoritas. Conocía tanto a su pelinegra amiga que, aunque no lo admitiera en voz alta, sabia que aquella casa era para ella.
Desde que se conocieron, la pelinegra habia demostrado tener muchas cualidades en común con esa casa. Tambien que, si se lo proponía, podría sacar uñas y garras para defender a sus seres queridos, sin importarle las concecuencias.
En cambio, por parte de la chica con mirada café, hablaba animadamente con el sombrero. Ni bien la habían puesto el sombrero que decidía en donde quedaría cada alumno, él había demostrado cierto interés en la chica.
Estaban tan concetrados en su conversación, que perdieron la noción del tiempo.
Solo se dieron cuenta de aquello, cuando una tos falsa resonó por todo el gran comedor (el cual se hallaba en silencio) y fue en ese entonces, donde por fin, decidieron en que casa quedaría Adhara.
Nadie (ni si quiera su ahora casa) se había imaginado que quedaría seleccionada en esa casa. Nadie, excepto el oji-gris. El cual, sin darse cuenta, plasmo una cara de... ¿Desilusión? ¿Decepción? No existía ni un solo fundamento para explicar lo que siente.
Él, aun se aferraba a esa pequeña fe que poseía, para que su mejor amiga quedara en su casa, y no en la que está.
El gran comedor, aún se hallaba em silencio, ni siquiera los profesores pensaron que aquella alumna, tan carismatica y divertida, fuera seleccionada para esa casa.
Como e estado diciendo, nadie lo pensaba. Y solo fue hasta que Adhara se paró con una sonrisa de Triunfo para dirigirse a su casa, que todos reaccionaron.
Su casa, en la cual se quedaria por 5 años, empezaron a celebrar y aplaudir por obtener una nueva integrante. Rebosaban de tanta felicidad que, hacían burlas hacia las otras casas.
El cabello de la chica, a medida que caminaba y se acercaba a su casa, cambiaba de color, a los colores de su casa, la cual iba a amar y defender a toda costa.
Aunque siempre hablaran mal de esa casa, al igual que de todas, ella estaba feliz de haber quedado ahí. Porque uno de los mejores magos del mundo quedo ahí.
Pero... También le invadía la tristeza, ya que sabía que su mejor amigo iba a pasarla mal, pero ya se las arreglaría, pensó ella.
Estaba tan cerca de su casa y su cabello ya no estaba con su habitual color negro, si no que en su lugar estaban los colores verde y blanco (o plomo).
Sí señoras y señores. Adhara Casiopea Mía Jone Smith había quedado en ni más ni menos que en Slytherin.
La casa enemiga de Gryffindor - pensó Sirius.
Editado el
11/11/2018
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Blood Traitors (Sirius y tú) Blood Saga #1
Fanfic- Eres peligrosa... - razonó él pero, antes de que ella hablara, añadió - un amor prohibido no creo que sea del todo malo - sonrió acercándose a ella - ¿Crees que olvidaré todo lo que hemos vivido y me alejaré? - ella no podía emitir ni una palabra...